La especulación en el mercado de los metales preciosos y el brillante futuro del oro

  • 10 de junio, 2019
[caption id="attachment_22141" align="aligncenter" width="300"] Silver ingot and gold bullion. Finance illustration[/caption] La reciente escalada en el precio del oro, que va a continuar, ha aumentado aún más su diferencia con la plata, en una proporción que no responde a la realidad, sino a la especulación a la que está sometido el mercado de los metales preciosos.
por José Ángel Pedraza La subida del precio del oro ha elevado la ratio oro/plata (que mide el número de onzas de plata que se necesitan para adquirir una de oro) a un máximo de 90, que no se alcanzaba desde hace más de 15 años. Los analistas consideran que semejante diferencia entre ambos metales es desproporcionada. En un interesante post, el experto en metales preciosos Craig Hemke explica el motivo por el que esta ratio ha crecido hasta estos niveles y asegura que el oro ha emprendido el camino para alcanzar máximos históricos en dólares. Por su interés, reproducimos a continuación este post, que fue publicado en su blog. "El precio del oro y la plata no se establece por medio de un mercado de metales físicos, sino por medio de un mercado de derivados, por lo que estos precios no tienen una relación directa con el metal físico. A todo el mundo le sorprende el hecho de que la ratio oro/plata pueda estar en 90 a 1, cuando históricamente se ha situado entre 10 y 15 a 1, basándose en la cantidad de plata física que se supone que existe en el subsuelo, frente a la cantidad de oro físico. Les diré por qué se encuentra actualmente en 90 a 1: se debe a que el precio ya no depende del suministro físico, sino del suministro de contratos derivados y referenciados al metal. Si hay algo que demuestra hasta qué punto se ha pervertido el sistema, es la ratio oro/plata. Nuestra esperanza (y continuamos esperándolo) es que se llegue a un punto de inflexión en todo este apalancamiento, reapalancamiento, cuentas sin asignar y toda esta alquimia ideada por la banca para vender productos referenciados al oro y la plata en el mercado, en vez del propio metal. Cuando llegue ese momento, será cuando las cosas se pongan realmente interesantes. Mientras tanto, las condiciones que llevaron a los inversores a adquirir oro o plata físicos (entre los que me incluyo) como protección en 2010, 2011 y 2012 no han cambiado. De hecho, estas condiciones han empeorado: los desequilibrios sistémicos se han vuelto más extremos. Y ello, a pesar de que el precio del oro se ha movido en un rango bastante estrecho en los últimos seis años, lo que ha provocado que exista un pequeño coste de oportunidad derivado de haber cambiado dinero en efectivo por oro hace siete u ocho años. Pero las condiciones que llevaron a los inversores a apostar por el oro no han cambiado. Ahora que nos encontramos en un momento crítico, en que se está retirando la marea de confianza en los bancos centrales, es probable que empecemos a ver cómo aumentan los precios del oro y la plata en dólares. Solo hay que examinar el comportamiento de otras divisas mundiales como el dólar australiano, el dólar canadiense, la rupia india o la lira turca. En todas estas divisas se están registrando ahora mismo los precios máximos históricos del oro. Pero aún no ha sucedido lo mismo con el dólar estadounidense. Todavía. Muy pronto le llegará el turno al dólar. Eso es lo que trato de hacer entender a la gente: que no se han producido cambios a nivel macroeconómico o desde el punto de vista del sistema financiero. Por eso, las razones por las que se invirtió en oro o plata al principio no han cambiado". Oroinformacion.com