La economía en cuarentena obligatoria: ¿todos pierden?
- 13 de abril, 2020
La crisis del coronavirus derrama en casi toda la economía. Casi todos los sectores padecen el impacto de la cuarentena, pero en la perinola de los negocios no todos pierden. Analistas y consultoras creen que el agro, los servicios de salud, las comunicaciones y el eCommerce cuentan con buenas chances de resistir y hasta de crecer dentro del cuadro recesivo. Los economistas estiman una caída de 0,5% del PBI por cada semana de cuarentena. Las proyecciones oscilan entre 5 y 7% de caída en el año, en función de la extensión y el rigor de la cuarentena. Los rubros más golpeados, según
La crisis del coronavirus derrama en casi toda la economía. Casi todos los sectores padecen el impacto de la cuarentena, pero en la perinola de los negocios no todos pierden. Analistas y consultoras creen que el agro, los servicios de salud, las comunicaciones y el eCommerce cuentan con buenas chances de resistir y hasta de crecer dentro del cuadro recesivo.
Los economistas estiman una caída de 0,5% del PBI por cada semana de cuarentena. Las proyecciones oscilan entre 5 y 7% de caída en el año, en función de la extensión y el rigor de la cuarentena. Los rubros más golpeados, según proyecciones provisorias de Abeceb, son el transporte (caída anual de 16,5%), hoteles y restoranes (15,1%), servicios sociales y personales (14,1%), construcción (11,9%), comercio (9,2%) y la industria(8,3%).
"Todos los sectores pierden", define tajante Fausto Spotorno, economista de OJF, aunque aclara que sólo el agro zafa, "por dos motivos: primero, porque es una actividad exceptuada y por otro, porque la cosecha fue buena". Spotorno también prevé posibles mejoras en "subsectores", como el comercio electrónico y los insumos médicos.
El eCommerce cobró un gran impulso con el inicio del aislamiento obligatorio. El auge de las ventas online sorprendió a varias vertientes comerciales (supermercados, quioscos, restoranes y farmacias), incluso a las plataformas de delivery, como Pedidos Ya, Rappi y Glovo. Por la avalancha de pedidos a los súper, se establecieron cupos para poder cumplir. "Las órdenes se triplicaron y muchas no se pudieron ejecutar", reconoció el gerente general de Pedidos Ya, Sebastián Genesio.
El delivery es una de las pocas actividades permitidas. Eso no implica que no afronten dificultades. Genesio explica que tienen 3 indicadores clave para evaluar su operación. "El nivel de usuarios (subió), los repartidores (los mantenemos), pero el único problema es que el 80% de los comercios está cerrado". Sobre este punto, explica que "los restoranes no pueden atender al público, pero no están impedidos de hacer delivery".
Los supermercados también fueron desbordados. Antes de la crisis, el eCommerce, para las cadenas, representaba entre 1 y 4% de la facturación total. La más desarrollada en ese aspecto era Coto, cuyo canal Coto digital le venía reportando entre el 6% y 7% de sus ingresos. "Con la cuarentena, las ventas online se dispararon 80%", confiaron fuentes del sector.
Las cadenas de electrodomésticos abren la semana que viene sólo para cobrar las cuotas de los créditos personales
El canal electrónico, para La Anónima, tiene su particularidad. Con un total de 162 tiendas, la mayoría en el sur del país, la cadena ofrece online únicamente electrodomésticos, muebles y bienes durables, bajo la modalidad de retiro en el punto de venta. "Esto tiene mucho sentido: la mayoría de nuestros locales están en ciudades chicas y pueblos del interior, donde la gente está muy cerca y en general tiene auto", dijo al Económico Federico Braun, su titular.
El empresario añade que prevén sumar en breve todas las categorías de alimentos y bebidas a su canal digital, siempre con el formato de entrega en el local. "A partir de la crisis aceleramos en ese sentido y es algo que viene funcionando muy bien en Europa, sobre todo en Francia.En España, las ventas online se duplicaron con la cuarentena", remarcó.
El aislamiento social introduce fuertes cambios en los patrones de consumo. Así lo indican dos encuestas elaboradas por Kantar Insights, una semana antes y la inmediata posterior a la cuarentena obligatoria. "En la primera, el 44% dijo que compró o compraría online categorías que no consumía, como alimentos y bebidas. En la segunda, el porcentaje saltó al 61%", señaló Sebastián Corzo, director comercial de esa consultora. Eso no es todo. "El 30% de ese universo son nuevos usuarios", destacó el experto.
En modo especulación, el director de la consultora W, Guillermo Oliveto, considera que la crisis del coronavirus modifica los patrones promedio de consumo y que se está creando "una nueva normalidad" que emergerá de la pulseada que existe "entre el deseo y el miedo". Oliveto afirma que todavía se desconoce la duración de la cuarentena y el modo en que termina. "Si persiste el temor (al contagio) es probable que se acabe el rally de compras en busca del mejor precio para acotar los riesgos", dijo.
Casi todos los sectores están prácticamente paralizados por la cuarentena. Según Cammesa (la administradora mayorista de electricidad), el consumo eléctrico en la construcción cayó 93,1%. También cae fuerte en el textil (84,3%), automotor (70,5%), madera y papel (46,1%), la producción de artículos masivos (44%), minería (30,4%) y supermercados y shoppings (19,3%).
Instinto y oficio: las recetas empresariales para zafar de la crisis
En este contexto tan negativo, los servicios de salud tienen un panorama más aliviado. El segmento incluye categorías muy diversas que abarca laboratorios, clínicas, farmacias, droguerías y también productos sanitarios, como el alcohol, medicamentos y barbijos, entre muchos otros. "En principio -comenta el economista de Abeceb Javier Cao- parece ser el sector menos perjudicado".
De todos modos, Cao aclara que no se trata de un boom "Se prevé un alza en la demanda de servicios, más hospitales, horas de atención y una mayor contratación de profesionales. Pero es un efecto heterogéneo ya que hay varios servicios suspendidos, como traumatología, cirugías programadas o tratamientos de kinesiología", finalizó.
Con miras al pico de contagios, muchas clínicas y sanatorios tienen un 50% de ocupación. Además, muchas áreas se reconvierten para enfrentar a la pandemia. "El rubro aparece como muy pujante si se lo compara con el resto de las actividades", distingue Pablo Viner, director general de la Suizo Argentina, uno de los mayores proveedores de artículos para farmacias, hospitales, laboratorios y centros de salud.
De capitales nacionales, la Suizo Argentina vende 20.000 productos diferentes, desde medicamentos, alcohol en gel, instrumental médico y barbijos, hasta tomógrafos. La crisis, sin embargo, desvirtuó la operatoria, tal como ocurre con los centros de salud. "La demanda de barbijos (para usos quirúrgicos) creció exponencialmente", enfatizó el ejecutivo. En su mayoría, provienen de China. "Su costo era de $2. El precio, hoy, se multiplicó por 10", se lamentó Viner.
Efecto Covid-19: se pierden US$427 millones por día sin actividad
Cada día en cuarentena representa una pérdida económica de US$427 millones. Los rubros más golpeados, según un estudio de la consultora Inveq, son la industria manufacturera y el comercio, que dejan de facturar alrededor de US$118 millones diarios debido al rigor del aislamiento. Sin ir más lejos, desde la UIA advirtieron que el entramado industrial argentino opera al 20% de su capacidad.
Al cierre de esta edición, el Gobierno evaluaba extender la cuarentena obligatoria hasta fines de abril o principios de mayo, con la posibilidad de aligerar la veda en cuentagotas en algunas actividades. "El impacto de las medidas oficiales se traslada a la economía real, que se verá más afectada cuanto más duren", señala un estudio de la consultora Abeceb. La mayoría de los entendidos estiman una caída de 0,5% del PBI por semana.
"El escenario económico y de cada actividad lo define el Gobierno y esa es una de las incógnitas del momento", enumera Esteban Domecq, director de Inveq. El experto añade que hay otras dos por revelar: "Por un lado, el margen de flexibilización de algunas actividades que hoy están paralizadas. Y por último, resta conocer el daño en la macro (empleo, salarios, por ejemplo) y cómo se manifiesta en los próximos meses", finalizó.
Por el vértigo de la crisis, las consultoras revisan casi a diario sus proyecciones anuales. Las estimaciones de caída del PBI oscilan hoy entre 5% (Orlando Ferreres) y 6,3% (Abeceb). Esta última consultora prevé una caída anual de 7% promediando todos los rubros y sectores. "La medición excluye alimentos, bebidas, artículos de farmacia y otras actividades esenciales", aclararon.
El coronavirus modifica la realidad de muchos sectores y en los hábitos de compra. Una encuesta reciente de Kantar Insights reveló que "los argentinos están cambiando comportamiento de consumo y las expectativas ante las marcas". Pero no sólo cambian lo que compraban sino cómo se compra.
"Las personas tratan de evitar las aglomeraciones y centran sus compras en comercios cercanos", remarcan sus autores. En rigor, el 68% declaró que compra más alimentos no perecederos y 64%, más productos de limpieza y desinfectantes". La misma encuesta subraya que "4 de cada 10 argentinos creen que aumentarán sus compras online" y concluye que "el comercio electrónico sumó nuevos compradores, en especial en categorías como alimentos y farmacia".
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El gerente general de la plataforma Pedidos Ya, Sebastián Genesio, sostiene que el eCommerce ya venía con esa tendencia. "Claramente, la crisis la aceleró y se observa una mayor penetración en la base de usuarios y también el uso de la aplicación", dijo. Pedidos Ya cuenta con una red de 20.000 comercios adheridos, principalmente restoranes, hamburgueserías, casas de comida, cadenas fast food y cafeterías. Genesio destaca que si bien las ventas online de los súper se multiplicaron por 3, "el negocio todavía no pesa tanto en nuestro esquema general".
Por estos días, los supermercados no dan abasto para cumplir con los pedidos. "La mayoría de las cadenas no tenía una estructura armada para responder", señalan fuentes del sector. El desafío es mayúsculo, porque a las restricciones que impone la cuarentena en las tiendas físicas (menos personal y tope de compradores) se superpone la necesidad de responder al incremento de los pedidos.
Con 920 tiendas (entre propios y franquiciados), Día anunció que extendió la cobertura de compras online a un total de 160 locales y que acaban de incorporar 450 personas para responder al incremento de la demanda. Los especialistas todavía no tienen en claro si la disparada de la demanda electrónica continuará a la salida de la cuarentena. "Dependerá de la calidad de la experiencia", coinciden. "Vamos hacia una normalidad diferente, pero aún no la conocemos", opinó Guillermo Oliveto.
Clarín