Un informe pone de relieve la falta de nuevas minas de oro en la última década

  • 13 de mayo, 2020
Durante los últimos diez años, las compañías mineras de oro han centrado sus esfuerzos en el desarrollo de los proyectos ya conocidos, en vez de en la exploración de nuevos yacimientos. Ello ha provocado que en la actualidad exista en la cartera de proyectos de las mineras un importante déficit de nuevas explotaciones de primera categoría que sustituyan a las mineas que se van agotando. por José Ángel Pedraza Según un reciente informe publicado por S&P Global Market Intelligence, se ha registrado un declive en el descubrimiento de yacimientos de

Durante los últimos diez años, las compañías mineras de oro han centrado sus esfuerzos en el desarrollo de los proyectos ya conocidos, en vez de en la exploración de nuevos yacimientos. Ello ha provocado que en la actualidad exista en la cartera de proyectos de las mineras un importante déficit de nuevas explotaciones de primera categoría que sustituyan a las mineas que se van agotando.

por José Ángel Pedraza

Según un reciente informe publicado por S&P Global Market Intelligence, se ha registrado un declive en el descubrimiento de yacimientos de oro de primer nivel durante los últimos años, provocado por el hecho de que las compañías mineras han preferido centrarse en los depósitos ya conocidos.

De hecho, las partidas presupuestarias destinadas a la exploración en busca de nuevos yacimientos se han reducido a la mitad con respecto a los datos de la década de los 90 del siglo pasado.

El informe de S&P Global Intelligence revela que no ha tenido lugar ningún descubrimiento de un yacimiento de primer nivel en los últimos tres años. Los 25 depósitos hallados durante la pasada década apenas contienen 154,3 millones de onzas (4.799 Tm), que representa solo un 7% del oro que contienen los yacimientos descubiertos desde 1990.

Según el informe, esta carencia en el descubrimiento de nuevos yacimientos de clase mundial durante la última década es el resultado de la política de las compañías mineras de centrar sus esfuerzos en los activos en fase avanzada de desarrollo y en los yacimientos ya conocidos, en vez de en la búsqueda de nuevos depósitos.

De las cuatro nuevas explotaciones que se anunciaron a lo largo del pasado año 2019, ninguna había sido descubierta en los últimos años. Así, el anuncio del descubrimiento de 4,2 millones de onzas (130 Tm) en Gran Bestia (Ecuador) por parte de la compañía Lumina Gold (en la imagen, trabajos de perforación en la zona) se refiere a una nueva zona del depósito Cangrejos, que fue descubierto en 1999.

El depósito de 4 millones de onzas (124 Tm) de oro de Chulbatkan (Rusia) anunciado por N-Mining Limited fue descubierto en 1980.

El depósito de 3,2 millones de onzas (99,5 Tm) de Nelligan (Canadá) anunciado en 2016 es el descubrimiento más reciente, mientras que el depósito de Estelle (Alaska, EEUU) de 2,5 millones de onzas (77,7 Tm) se perforó por primera vez en 1988.

África e Hispanoamérica

Los diez países de África e Hispanoamérica en los que se realizaron descubrimientos durante la pasada década representan dos terceras partes (102,3 millones de onzas, 3.182 Tm) del total de 154,3 millones de onzas (4.800 Tm) descubiertas.

Por regiones, el informe de S&P subraya que los recientes descubrimientos que han tenido lugar en Canadá y los Estados Unidos albergan muy poco oro: apenas un 17% del total de la última década, frente al 37% de África y el 29% de Hispanoamérica.

Entre los países con mejor futuro para la exploración, el informe destaca a Ecuador, que alberga el mayor descubrimiento de oro del periodo 2010-2019: el depósito de oro y cobre de Cascabel, explotado por la minera australiana SolGold.

Antes de 2010, los mayores descubrimientos de oro tuvieron lugar en los Estados Unidos (14%) y Australia (10%). Pero desde ese año, solo han registrado un descubrimiento cada uno, con EEUU totalizando el 10% y Australia apenas el 4% del oro descubierto en los últimos diez años.

Tamaño de los activos

De los 154,3 millones de onzas (4.800 Tm) contenidas en los 25 descubrimientos que han tenido lugar durante la última década, el 70% se acumula en los 10 mayores depósitos.

El mayor de ellos es el depósito de oro y cobre de Cascabel (Ecuador), propiedad de SolGold. Fue encontrado en 2013 y se estima que puede producir anualmente unas 150.000 toneladas de cobre y 245.000 onzas (7,6 Tm) de oro.

El proyecto de Haiyu (Shandong, China), propiedad de Zhaojin Mining, es el segundo mayor descubrimiento. Fue encontrado en 2011 y contiene alrededor de 16,4 millones de onzas (510 Tm) entre reservas y recursos.

Por su parte, el descubrimiento de Goldrush (Nevada, EEUU) por parte de Barrick Gold, también de 2011, es el tercero, con 14,9 millones de onzas (463,4 Tm) de oro entre reservas y recursos.

Falta de repuestos para las minas más antiguas

El informe señala también que aunque aún existen numerosos activos de oro por desarrollar, la ausencia de descubrimientos importantes implica que la cartera de proyectos adolece de activos de primer nivel que sustituyan a las minas de oro más antiguas que se van agotando.

Desde S&P Global Market Intelligence han identificado un total de 278 depósitos descubiertos entre 1990 y 2019, que contienen 2.190 millones de onzas (68.116 Tm) de oro, entre reservas y recursos. De ellos, 135 aún no están en fase de producción.

Tan solo 30 de estos depósitos cuentan con más de 10 millones de onzas (311 Tm) de oro entre reservas y recursos, y solo 9 de ellos cuentan con una concentración de un gramo de metal o más por tonelada.

Algunos activos entrarán en fase de producción durante los próximos años, como el proyecto de Goldrush (EEUU, Barrick Gold) o el de Buritica (Colombia, Zijin Mining).

Otros, como el de Rosia Montana (Rumanía), se enfrentan a importantes dificultades, que pueden impedir que lleguen a explotarse, mientras que otros, como el de Donlin (Alaska, EEUU), de NovaGold Resources, tienen que recorrer un largo camino antes de llegar a la fase de producción.

Las estimaciones actuales apuntan a que la producción de oro procedente de las minas que actualmente están en explotación comenzará a decrecer en 2022, por lo que existe la necesidad de desarrollar a medio plazo un número mucho mayor de activos de primer nivel.

Oroinformacion.com