Catamarca: Poder, se podía

CAMYEN, aseguran sus autoridades, consiguió por fin equilibrar sus finanzas tras ocho años de déficit sistemático. Es lícito que las autoridades de la sociedad del Estado Catamarca Minera y Energética (CAMYEN) califiquen su primera exportación directa de rodocrosita como un acontecimiento histórico, no tanto por ser la primera operac

CAMYEN, aseguran sus autoridades, consiguió por fin equilibrar sus finanzas tras ocho años de déficit sistemático.

Es lícito que las autoridades de la sociedad del Estado Catamarca Minera y Energética (CAMYEN) califiquen su primera exportación directa de rodocrosita como un acontecimiento histórico, no tanto por ser la primera operación de este tipo sin intermediarios, sino porque con ella la firma alcanzó, aseguran, "un equilibrio financiero" que le permitirá impulsar programas de desarrollo local.

Un quiebre: creada en enero de 2012 con el propósito de dotar a la Provincia de un instrumento para obtener dividendos adicionales a las regalías del negocio minero, CAMYEN estabiliza sus cuentas tras ocho años durante los cuales el Tesoro Provincial debió auxiliarla en forma sistemática para enterar cifras que le permitieran cubrir hasta el pago de salarios.

Entender los rojos empresariales demandaba adentrarse en pesquisas detectivescas. Tras litigar contra los propietarios de la tristemente célebre SOMICA DEM, CAMYEN accedió a los derechos de explotación de Minas Capillitas y con ello al monopolio de la extracción y comercialización de la rodocrosita, pero este potencial se licuó con la conformación de un "circuito negro" de tráfico de la piedra que quedó varias veces al descubierto con secuestros de cargamentos clandestinos.

Esta etapa de pérdidas recurrentes, sea por enjuagues ilícitos, impericia gerencial o una conjunción de ambos factores, ha quedado según las nuevas autoridades atrás y acaso augure horizontes más promisorios, en los que la empresa pueda asociarse con inversores privados y multiplicar la renta minera provincial, como pasó en Alumbrera con la incorporación de Yacimientos Mineros Aguas de Dionisio.

La venta de CAMYEN, con destino a Hong Kong, fue realizada a la empresa Blue Gems Supplier, líder en el mercado de gemas y piedras preciosas.

"Esto es muy importante porque, además de ser un hecho inédito para nuestra empresa, abre muchas puertas para incrementar esta modalidad de transacciones", resaltó Guillermo Haddad, presidente de la firma estatal, y resaltó que la operación implicó una mejora del 40% en el precio en dólares del producto.

    CAMYEN, aseguran sus autoridades, consiguió por fin equilibrar sus finanzas tras ocho años de déficit sistemático

CAMYEN, entonces, podía prosperar. Era cuestión de decisión política para colocar en su conducción a personas idóneas. El ministro de Minería, Rodolfo Miccone, marcó como objetivo "tratar de que CAMYEN sea propietaria de áreas que tengan un alto potencial en recursos", hecho que le permitiría insertarse en el negocio minero con mayor solidez.

YMAD, mientras tanto, ya bajo la presidencia del Fernando Jalil, ha trasladado su sede a Catamarca.

"Es una empresa de Catamarca con oficina en Buenos Aires, no como era antes, que estaba en Buenos Aires con oficina en Catamarca", señaló Jalil a la salida de una reunión en Casa de Gobierno, al tiempo que destacó que CAMYEN haya abierto sus oficinas en Andalgalá y que su presidente, Haddad, sea oriundo de allí.

Sería necio negar lo significativo de estos cambios geográficos, pero en el caso de YMAD todavía le falta bastante para remontar el legado de las anteriores presidencias, tras el proceso de decadencia sostenida iniciado por Santiago Albarracín. Desafío doble, ahora que Catamarca recuperó la Presidencia de la firma después de más de dos décadas y la mayoría propia para hacer valer los criterios provinciales, imponerlos llegado el caso, en el directorio.

El asunto más destacado que aguarda una solución de Fernando Jalil es el del alquiler de la infraestructura de Minera Alumbrera a Minera Agua Rica, que se pactó por un anticipo de 12,5 millones de dólares cuando los bienes rentados costaron más de 1.300 millones. Las condiciones de este acuerdo fueron poco claras y objetadas por la Universidad Nacional de Tucumán. Por si o por no, el desenlace sigue pendiente.n

El Ancasti