Oro y plata, un seguro tangible en forma de activos que les protegen del sistema financiero

  • 17 de junio, 2020
Los lingotes de oro y plata son los metales preciosos más conocidos del mundo, y ambos han desempeñado papeles clave a lo largo de la historia como formas de dinero, de ahorro y como medios de protección de la riqueza. Hoy en día, el oro y la plata físicos en forma de lingotes y monedas de inversión o bullion son muy apreciados por los ahorradores e inversores como depósitos de valores, como activos seguros en tiempos de crisis financieras y como formas prácticas de diversificar las carteras de inversión. por José María Martínez Gallego El oro y la plata son reservas probadas de valor porque retienen su poder adquisitivo con el tiempo y protegen contra la inflación y

Los lingotes de oro y plata son los metales preciosos más conocidos del mundo, y ambos han desempeñado papeles clave a lo largo de la historia como formas de dinero, de ahorro y como medios de protección de la riqueza. Hoy en día, el oro y la plata físicos en forma de lingotes y monedas de inversión o bullion son muy apreciados por los ahorradores e inversores como depósitos de valores, como activos seguros en tiempos de crisis financieras y como formas prácticas de diversificar las carteras de inversión.

por José María Martínez Gallego

El oro y la plata son reservas probadas de valor porque retienen su poder adquisitivo con el tiempo y protegen contra la inflación y los aumentos en el nivel general de precios. Cuando los compra, está protegiendo su poder adquisitivo de la inflación.

El oro y la plata también son activos de refugio seguro, y en tiempos de crisis de los mercados financieros, los inversores acuden a la seguridad de los dos metales porque el oro y la plata están libres de riesgo de contraparte. Dado que sus precios se mueven de diferentes maneras a los precios de acciones y bonos, diversificar su cartera de activos de inversión para incluir las tenencias de oro y plata físicos también puede reducir el riesgo general de su cartera.

Tradicionalmente, el oro y la plata surgieron como dinero circulante entre las civilizaciones del mundo precisamente porque estos dos metales eran los activos más adecuados para desempeñar los roles del dinero y la preservación de la riqueza. Para ser adoptado y utilizado de manera amplia y consistente como dinero, debe ser duradera, fácilmente divisible en unidades similares, ser difícil de falsificar, ser portátil y tener un suministro limitado. Las mejores formas de dinero también tienen un valor intrínseco. Las monedas de oro y plata surgieron y se hicieron confiables y generalmente aceptadas en las transacciones económicas por el solo hecho de que cumplían con todos estos requisitos de ser dinero.

Oro y plata: la elección natural para dinero real

El oro y la plata son activos tangibles que aparecen naturalmente en depósitos en y cerca de la superficie de la tierra, pero en cantidades tan limitadas que aseguran un valor de escasez. Ambos metales son difíciles y costosos de extraer y tienen características metálicas que los hacen demandados para diversos fines científicos, industriales y de joyería. Por lo tanto, tienen un valor intrínseco. Tanto el oro como la plata son elementos químicos no reactivos, duraderos y estables, y con un punto de fusión lo suficientemente bajo como para fabricar fácilmente monedas y lingotes. Las monedas y lingotes de oro y plata se emiten en pesos conocidos y purezas de metales, por lo que son fungibles (es decir, sustituibles) y, lo que es más importante, el oro y la plata son difíciles de falsificar y no se pueden crear ni destruir.

Por lo tanto, con el tiempo, el oro y la plata evolucionaron como las únicas formas de dinero aceptadas en las disposiciones de las tres funciones principales: un medio de intercambio,  una reserva de valor y una unidad de cuenta.

A medida que las sociedades y los sistemas monetarios se volvieron más sofisticados, el oro y la plata se utilizaron como respaldo o fundamento de los suministros monetarios de muchos países, es decir, los estándares de oro y plata de los siglos XIX y XX. De hecho, el oro fue el ancla de todo el sistema monetario mundial entre 1944 y 1971 en la Era monetaria de Bretton Woods.

Es interesante observar que tanto el oro como la plata se han utilizado como dinero desde el año 600 antes de Cristo, por lo que ambos metales tienen registros mucho más largos como dinero que cualquier papel moneda sin respaldo. Esto significa, por ejemplo, que el oro ha sido aceptado y utilizado como dinero durante 2.500 años, con papel moneda sin respaldo en forma de monedas fiduciarias solo en la escena por un simple momento.

A diferencia de muchos otros activos de inversión, como bonos y acciones, cuando se posee oro y plata físicos no existe riesgo de contraparte. Esto se debe a que no hay contraparte. Compare esto con un bono gubernamental o corporativo en el que el emisor sea su contraparte. Del mismo modo, no hay riesgo de incumplimiento con el oro y la plata, porque con ellos no hay una entidad emisora ??que pueda declararse en quiebra o que pueda incumplir.

Las inversiones en oro y plata son activos tangibles producidos a partir de la minería y la refinación que existen en oferta limitada. No son creados por las autoridades monetarias, los gobiernos o los bancos centrales, y ambos metales no están sujetos a interferencia política o dilución de sus suministros.

Por otro lado, las monedas fiduciarias como el dólar estadounidense y el euro están sujetas a la dilución de la oferta y a la interferencia política, todo lo cual erosiona su poder adquisitivo. Básicamente, las monedas fiduciarias o en papel no tienen ningún valor intrínseco y, en última instancia, el valor de todas las monedas en papel vuelve a cero. Por ejemplo, desde 1913, el dólar estadounidense ha perdido alrededor del 98/99% de su poder adquisitivo, mientras que durante el mismo tiempo el oro si lo ha mantenido.

Los bancos centrales saben muy bien que las monedas fiduciarias no tienen un valor inherente, razón por la cual los bancos centrales tienen grandes cantidades de lingotes y monedas de oro como parte de sus activos de reserva, para diversificarse de las monedas fiduciarias en forma de divisas que poseen, así como para mantener una reserva de valor que no se erosiona con el tiempo por la inflación, y para proporcionar fondos de emergencia en caso de crisis del mercado financiero.

En lo que respecta al suministro de los metales preciosos proviene de la producción minera y el reciclaje de esos metales, pero también proviene de las existencias en el suelo que se encuentran en cada metal. Estas existencias por encima del suelo significan que los suministros de oro y plata solo crecen lentamente con el tiempo en comparación con las cantidades totales existentes. En cuanto al oro, la cantidad total de oro extraído a lo largo de la historia es de aproximadamente 192.000 toneladas y casi todo este oro todavía existe por encima del suelo, en forma de joyas, tenencias de bancos centrales, oro de inversión del sector privado y el encontrado en aplicaciones industriales y tecnológicas.

La extracción de oro solo agrega alrededor de 3.200 toneladas de oro nuevo cada año a estas existencias. Por lo tanto, el stock de oro que ya existe en el mundo en relación con el nuevo flujo anual de la minería es de aproximadamente 60 a 1. Esto proporciona una relación de stock a flujo muy estable y ayuda a explicar cómo el oro actúa como un depósito de valor, un seguro refugio, una cobertura de inflación y por qué los precios del oro y la plata reaccionan menos a los ciclos económicos que otros activos.

Almacén de valor, preservación de riqueza y refugios seguros de confianza

El oro y la plata físicos son reservas probadas de valor que conservan su poder adquisitivo con el tiempo. Por ejemplo, a largo plazo, una onza de oro comprará aproximadamente la misma cantidad de bienes que hizo en el pasado a pesar de que los precios de esos bienes aumentaron, es decir, a pesar de la inflación. Es por eso que el oro físico se llama cobertura anti inflación. El oro puede retener su poder adquisitivo porque el valor total de las existencias de oro sobre el suelo (indicado por el precio del oro) se ajusta al alza a los cambios en el nivel general de precios. Compare esto con las monedas de papel que continuamente pierden valor con el tiempo y cuyo valor es erosionado por la inflación hasta que se inflan y se vuelven prácticamente inútiles

Ambos metales preciosos son activos bien conocidos en los que los inversores se refugian durante los períodos de mayor estrés del mercado y pánico financiero. Algo de esto se debe a la experiencia histórica, ya que los precios del oro y la plata generalmente aumentarán durante períodos de pánico, como el surgido durante el pasado mes de marzo debido a la pandemia mundial de la Covid-19. Pero más fundamentalmente, las personas mueven dinero hacia el oro y la plata durante las crisis del mercado porque los metales preciosos físicos no tienen contraparte ni riesgos de incumplimiento, una preocupación crítica durante la crisis del mercado.

También son activos seguros durante las crisis económicas y las situaciones de guerra y conflicto, ya que las personas pueden convertir su riqueza en metales preciosos y trasladarla a través de fronteras y revenderlos fácilmente debido a la alta liquidez, reconocimiento mundial y la existencia de mercados en prácticamente todos los países.

Reducción de riesgos y diversificación

Agregar una asignación de oro y plata a una cartera de inversiones de otros activos, como acciones y bonos, también puede proporcionar beneficios de diversificación a la cartera general, ya que reduce el riesgo y aumenta los rendimientos de la cartera. Esto es así porque los precios del oro y la plata no están altamente correlacionados con los precios de otros activos, lo que puede explicarse por el hecho de que los precios los metales se ven menos afectados por los ciclos económicos que las acciones y los bonos.

Dado que los patrones de demanda de oro y plata son diferentes entre sí, sus, aunque en su mayoría se mueven en la misma dirección, no se mueven en tándem, por lo que se beneficiará de la diversificación si ahorra o invierte en ambos.

Al ahorrar e invertir en oro y plata, es importante recordar que algunas formas de inversión en esos metales, como los ETF respaldados por el metal amarillo y los productos de oro papel, solo brindan exposición a los precios de dichos metales, pero no proporcionan la propiedad de los mismos.

Solo cuando compra se compran lingotes y monedas de inversión físicos se es propietario de metales preciosos reales, de pesos y purezas conocidos, y sus ahorros están en formas de dinero real y no son monedas fiduciarias. En tiempos de crisis o pánico en el mercado financiero, usted tiene metales preciosos reales, no solo un reclamo a una unidad de un ETF o una exposición a un producto de "papel sintético".

Es notable que los bancos centrales tengan oro real y no reclamaciones en papel porque solo el oro físico es una forma de seguro financiero contra las crisis financieras y una reserva de valor que la inflación no erosiona con el tiempo.

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