Polémica en las montañas: la lucha por el libre acceso

  • 20 de julio, 2020
Los montañistas esperan por la ley de libre acceso a las montañas Alejandro Rapetti Muchos recordarán la increíble historia. Luego de que cercara un terreno de 6 mil metros cuadrados lindero al mítico cerro de los Siete Colores, en Purmamarca, un hombre

Los montañistas esperan por la ley de libre acceso a las montañas

Alejandro Rapetti

Muchos recordarán la increíble historia. Luego de que cercara un terreno de 6 mil metros cuadrados lindero al mítico cerro de los Siete Colores, en Purmamarca, un hombre colocó un cartel que decía Prohibida la entrada. Propiedad privada, incluso sin tener pruebas de ser su propietario.

Se saltó el pormenor de que la Quebrada de Humahuaca, de la que el cerro de los Siete Colores forma parte, fue declarada Patrimonio Cultural y Natural de la Humanidad por la Unesco en 2003. El hombre insistía en ser propietario del sector y pretendía cobrar una entrada para visitarlo.

Más allá de la anécdota, la creciente restricción en los últimos años a determinados cerros con tradición en la actividad de montaña pone sobre la mesa un debate sobre la accesibilidad a las montañas.

"El problema es que la regla básica en nuestra Constitución es la propiedad privada. Toda tierra tiene dueño, sea el Estado o sea privado", advierte Mauricio Bianchi, abogado y montañista aficionado, fundador del Club de Montaña Andinautas de la provincia de Buenos Aires y vocero del colectivo Andinistas Argentinos que nuclea a diferentes clubes y grupos de montaña de todo el país.

Si bien por el momento la mayoría del territorio argentino no tiene ese tipo de restricciones para acceder libremente a las montañas, desde el colectivo Andinistas Argentinos aseguran que el problema es cada vez más creciente y significativo.

"En general, los problemas surgen por los intereses económicos, que producen que un espacio físico en un ambiente natural sea restrictivo para una actividad económica determinada, por ejemplo, la minería a cielo abierto, o como un "coto de caza" de cierto sector específico. O sea, solo dejo entrar a los que pagan tanto -explica Bianchi-. En el caso de la minería a cielo abierto, se desarrolla en grandes espacios de la Cordillera. Por ejemplo, el cerro Las Tórtolas, en San Juan, se encuentra en la zona de influencia de la Barrik Gold, una minera canadiense. El cerro tiene una rica historia, con restos incaicos y reliquias, pero hoy tiene un acceso absolutamente restrictivo por parte de la minera, donde solo se puede ingresar con un permiso bastante complejo de parte de la empresa".

Vale aclarar que se consideran actividades del montañismo el senderismo, el trekking, el ascensionismo y la escalada, así como las técnicas necesarias para realizarlas.

Entre otros tantos casos de restricción creciente, Bianchi señala el Cerro Mercedario, la mayor altura de la provincia de San Juan donde si bien no hay una restricción estricta, el control del paso lo tiene otra minera que puso una barrera donde hay que registrarse. Otro caso testigo es el Volcán Ojos del Salado (Catamarca), en el límite con Chile, un lugar al que por mucho tiempo se accedía relativamente fácil del lado argentino, por la RP 60, y desde hace un par de años el acceso está vedado, porque apareció un propietario o pseudo propietario que ahora cobra el paso. En el Valle de Los Lisos (Los Gigantes, Córdoba) otro lugar un lugar con más de 80 años de tradición en el montañismo, hace 4 años apareció una persona diciendo que es dueña del Valle de Los Lisos y cerró el acceso. O en las Sierras de Barker / Villa Cacique (provincia de Buenos Aires). Ubicada en el partido de Benito Juárez, durante años escaladores de la zona abrieron vías, y ahora hasta fueron denunciados como intrusos adentro de una propiedad privada.

Un final en suspenso

A partir de la Reforma del Código Civil, en 2012, se abrió la posibilidad de presentar propuestas sobre diferentes temas en audiencias públicas. Entonces, un conjunto de organizaciones de montaña de todo el país presentaron un documento sobre la servidumbre de acceso que buscaba fomentar el encauzamiento y el ordenamiento de la relación entre el ya legítimo "derecho de acceso y disfrute" con el también legítimo "derecho de propiedad" y un Estado que promoviera la armonización de estos derechos.

En aquel encuentro se fundó también el Colectivo Nacional de Clubes y Grupos de Montañismo Andinistas Argentinos, con la adhesión de medio centenar de clubes y grupos dedicados a la actividad en 18 provincias del territorio nacional.

Poco después, en 2015 surgieron algunos conflictos puntuales por restricciones de acceso a las montañas en Catamarca, y luego de un año de trabajo elaboraron un texto consensuado entre un grupo de aproximadamente 25 grupos de montañistas de todo el país.

Entre los puntos relevantes, se consigna: El montañismo no es turismo (se debe diferenciar claramente como actividad deportiva/cultural/científica; la libertad para su práctica sin imponer limitaciones tales como la obligación de obtener autorizaciones ni contratar guías y fundamentalmente garantizar el acceso a las montañas.

Ese texto se constituyó en el Proyecto de Ley Nacional de Fomento del Montañismo, que en marzo de 2017 ingresó a la Cámara de Diputados suscripto por 11 legisladores de 8 provincias distintas (7 de ellas cordilleranas) y de diversos partidos políticos. El proyecto se aprobó en Comisión de Deportes de Diputados y el 20 de noviembre de 2019 tuvo media sanción por unanimidad en esa Cámara. Posteriormente fue remitido al Senado Nacional donde se encuentra ahora, demorado en su tratamiento por las circunstancias de la pandemia.

Luego de la presentación nacional decidieron avanzar en presentaciones de proyectos provinciales y se sancionó la primera Ley Provincial de Fomento del Montañismo de todo el país, en San Luis.

"Básicamente, la Ley busca garantizar el acceso a los espacios de montaña en base a los principios de la declaración del montañismo argentino, asumiendo la propia responsabilidad y acotada a la práctica autónoma, es decir, sin fines de lucro. Si alguien está llevando un grupo de veinte personas y hace un negocio con eso, es diferente. Ahora si el tipo que llega es autónomo, va por su cuenta, por deporte o por un hobby, es otra cosa. Lo diferenciamos por el lucro. Entonces, si paga por un servicio, queda excluido de la ley", advierte el vocero de Andinistas Argentinos.

Y añade: "Cuando una persona le cobra a otra para pasar está asumiendo una cantidad de responsabilidades que ni siquiera se da cuenta, y ahí si entran a jugar un montón de otros aspectos. En cambio, cuando se permita que alguien acceda sin el cobro, y en el contexto de esta ley, se exime de todo esto.

¿Cuáles son las expectativas respecto de la sanción de la Ley Nacional? "Por ahora el Congreso sólo está tratando los temas que atañen al coronavirus. Pero contamos con el antecedente de la ley promulgada en San Luis, donde se aprobó por unanimidad tanto en Diputados como en Senadores tal como la presentamos. Por eso esperamos -y tenemos la promesa de muchos legisladores-, de que este 2020 se convertirá en ley nacional", concluye Bianchi.

Por otro lado Bianchi aclara que la ley no permitiría el acceso a todos lados, como sitios arqueológicos o de preservación ambiental, como determinados sectores de los parque nacionales. "El valor preservación arquelógico (como el ambiental) los mismos montañistas lo aceptamos como "valioso" y lo respetamos", agrega.

Por: Alejandro Rapetti

La Nación