La Rioja: Vera se mostró deseoso de que "la provincia y las autoridades públicas, instituciones intermedias, lleven a la mesa de diálogo la oportunidad de discutir la minería"

Entrevista al Ingeniero Hernán Vera, presidente de la empresa Seargen SA Uno de los temas que queremos abordar es el de los impuestos que paga el sector minero en la Argentina. Sabemos que son, para una actividad de esta magnitud, impuestos importantes, elevados que de alguna manera dejan ganan

Entrevista al Ingeniero Hernán Vera, presidente de la empresa Seargen SA

Uno de los temas que queremos abordar es el de los impuestos que paga el sector minero en la Argentina. Sabemos que son, para una actividad de esta magnitud, impuestos importantes, elevados que de alguna manera dejan ganancias a cada uno de los territorios en donde se encuentran radicadas las empresas mineras. En el contexto actual, ¿las empresas deben continuar pagando impuestos?

Sí, totalmente. En la medida que se va facturando, se van pagando todos los impuestos correspondientes. No ha habido ninguna excepción para este caso. Gracias por la pregunta Yair, porque a veces, no quiero decir mal intencionadamente, pero sí sin conocimiento, se dice que la minería sólo paga el 3% de impuestos. Y en realidad, lo que la minería paga es el 3%, además de lo que pagan todos los demás. El 3% se paga en concepto de regalías (por extracción de recursos naturales) a la provincia sobre el total de las ventas. Pero todos los demás impuestos que paga cualquier empresa son cargados a la industria minera. Se paga el impuesto a las ganancias, a los bienes personales, IVA, impuesto al cheque, a Sellos Ingresos Brutos. Con el adicional que al ser una industria que está totalmente en blanco, hace todos los aportes patronales y cargas sociales que corresponden a una empresa que tiene a todos sus trabajadores registrados. Así que la carga impositiva de la minería es sumamente importante.

Por último el concepto de retenciones (sobre las exportaciones) que impacta en la industria minera. Además, recordar que gran parte de los costos que la minería asume están relacionados al pago de proveedores de bienes y servicios locales, que son muy importantes. Te diría que el 60% de los impuestos son con bienes y servicios locales.

Mucho se ha hablado de que las mineras se llevan todo y no dejan nada.

Y en términos de dejar, lo que deja la minería no es solamente impuestos, que en mi opinión son muy importantes. Hay que considerar la cantidad importante de dinero que deja en concepto de pago de bienes y servicios a proveedores locales. Del costo total que tienen que afrontar las mineras para producir sus metales, casi un 50% corresponde a compra de bienes y servicios a proveedores locales. Y otra cantidad importante de dinero que queda en el país es la correspondiente a salarios. Los salarios rondan el 40% de los costos de una minera. Entonces, si sumamos impuestos, más proveedores locales, más salarios, la cantidad de dinero que deja la empresa minera en el país es sumamente significativa.

De acuerdo a esto podemos decir, es mucho lo que se gana, pero también es mucho lo que se deja. Y en función de este equilibrio hay que interpretarlo y hay que medirlo, porque en relación a eso uno debe tener atenta la mirada, como en cualquier actividad.

Todas las actividades económicas deberían pagar plenamente sus impuestos, quizá así estaríamos un poquito mejor. Pero yendo a números concretos, aunque a veces los porcentajes son importantes, pero es mejor hablar en plata fresca. Te doy el ejemplo de la provincia de San Juan, tengo datos de 2016. Ese año, exportó productos mineros por el equivalente a U$S 960 millones. De esos 960, 370 quedaron para proveedores locales, después se pagaron 210 en salarios para los empleados locales, 35 en impuestos a la provincia y 101 en impuestos nacionales. Es decir, de los U$S 960 millones que se exportó, 716 quedaron en Argentina en concepto de impuestos provinciales y naciones, salarios y proveedores locales. Casi el 75% de las ventas de la minera quedó en la Argentina. Entonces, está claro que la minería está contribuyendo en forma contundente en las economías locales. Imagínense multiplicar esos U$S 716 millones de dólares por 130, estamos hablando de más de $9.000 millones que están quedando en la provincia, en un momento en el que sólo dos minas estaban produciendo. Imagínense si en un futuro, la Argentina pueda tener pleno empleo de su potencial minero, podría multiplicarse por muchas veces esa cifra.

Son números más que interesantes, hablando sólo de una empresa. ¿Cómo están los avances aquí en Famatina? ¿Cómo está el tema de Seargen? ¿Cuál es la situación?

Está como estaba, más aún acentuado por la pandemia. Estamos deseosos de que la provincia y las autoridades públicas, instituciones intermedias, lleven a la mesa de diálogo la oportunidad de discutir la minería seria, responsable y comprometida, y además inclusiva para que Seargen esté en la primera línea de partida. Esperamos que nuestra compañía, que lleva varios años en la provincia, aportando a la provincia, alguna vez se nos cristalicen nuestros sueños, aspiraciones y podamos trabajar en la provincia, dar trabajo y oportunidades para todos.

Había una sana intención en este último tiempo. Pero la crisis, la pandemia generada por el Covid paralizó cualquier tipo de idea. Había un cambio, otra óptica, otra mirada y una decisión de avanzar en la minería, acá en la provincia. Yo entendí que esa era la lectura para ese tiempo.

Sí, yo creo que la realidad económica del país nos está llevando a la necesidad de generar todas las fuentes de trabajo que podamos. Hay mucha necesidad de trabajo, mucha necesidad de progreso, mucha necesidad de poder darle futuro a muchos chicos y chicas jóvenes, a familias, y creo que la minería puede ser una herramienta muy importante. Recién decía exportaciones en una provincia de casi U$S1.000 millones. Entonces, imagínense varias provincias trabajando la minería con todo su potencial. Había hablado de U$S 210 millones de salarios, estamos hablando de más de $20.000 millones en salarios distribuidos en una provincia. Yo creo que no hay mucha duda acerca del "qué", hay que discutir el "cómo". En ese sentido, creo que con la población, Doña Rosa, la autoridades intermedias, hay que discutir el "cómo", cómo vamos a hacer minería. Qué tipo de minería, qué intensidad se quiere. Si sólo se quiere la minería, si la planta de tratamiento tiene que estar a fuera, si hay refinería, o no hay refinería. Si quieren que haya elaboración de los productos derivados de minerales. Hay que planificar hasta cuánto la minería se quiere introducir dentro del panorama económico de una provincia. Si nos llaman, desde Seargen estamos dispuestos a poner nuestro granito de arena, para que en algún momento en la provincia que nació minera, se vuelva a convertir en minera y traiga prosperidad para todos.

Respetando la opinión y voluntad de todos. En tiempos complicados, podemos hablar de inclusión, control, planificación y todo lo demás. No hay que tenerle miedo a hablar, hay que perderle el miedo a disentir con argumentos en la mano, comprobables y creíbles para poder avanzar. No hay que tenerle miedo al hablar, a sentarse en una mesa. Pero son decisiones políticas que hay que tomar, porque también hay que saber leer. El problema de todo esto, a veces, me parece, no sólo está en situación en especial, sino en un todo, a veces no se sabe leer. Y cuando uno no puedo diagnosticar bien, por lo general, receta mal. Un buen diagnóstico nos permite un buen remedio, y la mejoría de todo. ¿Algo más que quieras agregar?

Yo creo que no podemos perder más tiempo. La provincia tiene que empezar a tener superávit. Es insostenible provincias que no puedan sostener, por lo menos el pan que consumen. Yo creo que todos tenemos que ponernos a trabajar, arremangarnos, y codo a codo trabajar, para sacar este país adelante. Yo hemos perdido mucho tiempo. Creo que los argentinos no estamos viviendo al nivel que deberíamos vivir considerando el país que tenemos. Entonces tenemos que tratar de poner la cabeza fría, bajar un poco los cambios, dejar de vernos como enemigos, y trabajar todos juntos para que, no sé si nosotros, pero por lo menos nuestros hijos tengan un futuro mejor que el que hemos tenido nosotros.

Fuente. Radio Ciudad de La Rioja (Raul Sosa y Yair Albarracín)