El reciclaje de plata, cada vez más necesario ante la caída de la producción minera

  • 13 de octubre, 2020
La producción de oro procedente del reciclaje es cada vez más importante. Varias empresas están experimentando con nuevas fórmulas para extraer el oro hasta de los dispositivos electrónicos descartados. Sin embargo, la industria del reciclaje no está tan avanzada en lo que respecta a otros metales como la plata, cuya producción se va a reducir en los próximos años. por José Ángel Pedraza  En el blog de la refinería C-Hafner ahondan en la cuestión del reciclaje de plata y señalan que, solo en Alemania, existen alrededor de 52.0

La producción de oro procedente del reciclaje es cada vez más importante. Varias empresas están experimentando con nuevas fórmulas para extraer el oro hasta de los dispositivos electrónicos descartados. Sin embargo, la industria del reciclaje no está tan avanzada en lo que respecta a otros metales como la plata, cuya producción se va a reducir en los próximos años.

por José Ángel Pedraza 

En el blog de la refinería C-Hafner ahondan en la cuestión del reciclaje de plata y señalan que, solo en Alemania, existen alrededor de 52.000 toneladas de plata en circulación, la mayoría en forma de joyas, objetos de plata o monedas.

Las previsiones apuntan a que, con el actual volumen de producción, la mayoría de las minas de plata existentes ahora mismo se agotarán en el plazo de 30 años. De ahí que, con la creciente demanda industrial de plata, se haga necesario incrementar el volumen de reciclaje para mantener la producción del metal.

Sin embargo, como señalan desde el blog de C-Hafner, no toda la plata antigua sirve a efectos de reciclaje. Hay que hacer una distinción entre los objetos de plata (jarras, tazas, platos, cubertería?), joyas viejas y lingotes o monedas.

La plata también se puede encontrar en dispositivos electrónicos o incluso en aparatos de rayos X. En este último caso, el contenido en metal es tan pequeño que se necesitan grandes cantidades de chatarra para garantizar que el proceso va a resultar económicamente rentable.

Por lo que se refiere a las joyas de plata, existe una considerable cantidad de ellas, ya que nunca han dejado de estar de moda y resultan más asequibles que las de oro.

En el caso de los lingotes y monedas de plata, a diferencia de los anteriores, es donde más fácil resulta determinar el valor real de la plata que contienen, ya que se sabe a ciencia cierta la pureza y la cantidad de metal que contienen, por lo que solo hay que consultar el precio actual del metal.

Las monedas de plata, además, pueden tener un valor numismático aparte del simple valor del metal que contienen, en función del interés que puedan despertar como piezas de coleccionismo. Por ello, desde el blog de C-Hafner recomiendan a quienes quieran vender este tipo de piezas que realicen una investigación sobre el valor numismático de las mismas o acudan a un experto.

Una de las posesiones de plata más habituales durante muchos años en los hogares de clase media han sido las cuberterías, por lo que es habitual que aún sean una importante fuente de plata reciclada. Sobre todo, teniendo en cuenta que desde hace años se vieron reemplazadas por las de acero inoxidable, más baratas y fáciles de conservar.

Al igual que en las piezas de oro, las de plata llevan una marca o contraste (?hallmark?, en inglés) que indica su contenido en metal puro. Así que bastaría con examinar esta marca para saber cuánta plata contiene el objeto en cuestión.

Como es lógico, los comerciantes que se dedican al reciclaje de plata no se fían solo de estas marcas para determinar la pureza de los productos, sino que cuentan con dispositivos de fluorescencia de rayos X (XRF, por sus siglas en inglés), que les permiten analizar las piezas y determinar con mayor precisión su contenido en plata pura.

Tipos de plata

Existen diferentes tipos de plata, dependiendo de la cantidad de metal puro que contienen y de los metales con los que ésta se encuentra aleada. Los más conocidos y comercializados durante muchos años son éstos:

Plata fina: se denomina así a la que tiene el grado más alto de pureza, equivalente al 99,9%. La mayoría de lingotes y monedas de plata se hacen de plata fina.

Plata de Britania: con ella se solían fabricar objetos como las cuberterías de plata. Consiste en una aleación formada por un 95,8% de plata y un 4,2% de cobre.

Plata esterlina: es la plata con la que se fabrican la mayoría de las piezas de joyería. Está formada por un 92,5% de plata y un 7,5% de otros metales, lo que aumenta su dureza y resistencia, necesarias para fabricar piezas de joyería que tienen que durar muchos años.

Existe también la llamada ?nickel silver? (en español ?alpaca?), que no hay que confundir con la plata, ya que se trata simplemente de una aleación de cobre, níquel y cinc que presenta un brillo y un aspecto muy similar al de la plata.

Clasificar antes de reciclar

Desde el blog de C-Hafner explican por qué es necesario clasificar los productos de plata antes de su reciclaje, en tres categorías: joyas, monedas y objetos de plata. La principal razón es la presencia de otros materiales junto a la plata en algunos de estos productos.

En el caso de las cuberterías, su reciclaje es más complicado. Los tenedores y cucharas suelen estar fabricados completamente en la aleación de plata indicada por la marca o contraste. Sin embargo, la hoja de los cuchillos es de acero inoxidable, que tiene un punto de fusión más alto que la plata, por lo que hay que separarla del mango antes de enviarlos al horno.

Además, el mango de los cuchillos suele contener arena, plomo o masilla. El plomo figura en la lista de los principales contaminantes prohibidos, ya que se funde a 327,5º C y puede resultar tóxico por medio del contacto o la simple inhalación.

Por ello, el mango de los cuchillos se separa y solo los que contienen plata se envían a las refinerías para su reciclaje, agilizando el proceso.

Con las piezas antiguas de joyería existe el problema de los contaminantes. En el pasado, las soldaduras de las joyas se hacían con cadmio o plomo, sustancias cuyo uso se prohibió hace año por su carácter potencialmente tóxico.

Por ello, las joyas que puedan contener plomo o cadmio deben ser tratadas por separado, lo que implica un coste adicional. Cuantos más puntos de soldadura tenga, más posibilidades habrá de que contenga elementos tóxicos, por lo que las piezas antiguas de joyería también deben separarse del resto antes del proceso.

Como explican en el blog de la refinería alemana, el reciclaje de plata resulta más económicamente rentable si se clasifican los productos antes de enviarlos a refinar. El aumento del reciclaje redundará en beneficio no solo del sector de la plata, sino de toda la sociedad, ya que reduce el impacto medioambiental de la producción minera de plata.

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