El Gobierno de Perú se arriesga a perder 50.000 millones de dólares de inversión en minería

  • 16 de diciembre, 2021
La industria minera es uno de los sectores más importantes de la economía peruana. En 2019, su aportación al producto interior bruto del país fue del 15%.

 

Representantes del sector minero de Perú, uno de los que más aportan a la economía del país andino, han denunciado que la intención del Gobierno de subir los impuestos a las compañías mineras podría poner en riesgo más de 50.000 millones de dólares en inversiones extranjeras en las minas peruanas y situar al país en desventaja competitiva frente a otros países de su entorno.

Según los últimos datos publicados por el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS), Perú es el segundo productor mundial de plata, cobre y zinc, y el octavo de oro.

En Hispanoamérica, el país es el mayor productor de oro, zinc, estaño, plomo y molibdeno, y cuenta con las mayores reservas mundiales de plata.

No es extraño que el sector minero peruano esté en pie de guerra después de que el Gobierno del populista Pedro Castillo haya manifestado su intención de aumentar la fiscalidad que grava a esta actividad tan importante para la economía andina.

El pasado domingo, 12 de diciembre, el ministro de Finanzas peruano, Pedro Francke, señaló que el Gobierno está dispuesto a incrementar los impuestos al sector minero entre un 3 y un 4%, argumentando que un reciente estudio publicado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) les indica que existe margen para esta subida fiscal.

Desde su elección el pasado mes de julio, el Gobierno del izquierdista Castillo se ha enfrentado a las compañías mineras que operan en el país, debido a su proyecto de redistribuir la riqueza minera y subir los impuestos para financiar programas sociales.

El sector minero también se ha quejado de que el Gobierno no ha hecho suficiente para combatir el bloqueo de las operaciones mineras por parte de diversos colectivos, que han llegado a afectar a la producción de diversos minerales.

La gota que ha colmado el vaso ha sido el anuncio de este aumento de al menos un 3% en los impuestos aplicados a la minería. Portavoces de la Cámara Minera del Perú afirman que esta subida de impuestos podría poner en riesgo más de 50.000 millones de dólares en futuras inversiones en el sector minero del país.

Por su parte, desde la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía de Perú advierten que la propuesta del ministro Francke dañaría “de forma irreparable” la competitividad de Perú en el sector minero, que es el principal motor de la economía del país.

Esta organización estima que la carga fiscal que soporta el sector minero peruano en la actualidad se acerca al 50% de sus beneficios, superando los porcentajes de otros países con los que compite directamente, como Chile (40%), Canadá (35,5%) o Australia (44,3%).

Sin embargo, desde el Gobierno peruano señalan que un reciente informe del FMI cuantifica que la tasa fiscal que soporta la minería del país es del 41,7%, más baja que la de Chile (47,1%).

El ejecutivo de Pedro Castillo está tratando de que el Congreso de Perú (dominado por la oposición), apruebe los planes de reforma fiscal antes de finales de año, aumentando el gravamen sobre el sector minero, que se está beneficiando de la subida de los precios de los metales.

Desde la Cámara Minera del Perú acusan al ministro de Finanzas de utilizar “una interpretación particular” del informe preliminar del FMI, que aún no ha sido publicado: “un rediseño inadecuado del régimen fiscal podría desincentivar las inversiones en la expansión de las minas actualmente operativas y en los nuevos proyectos mineros. Ello pondría en riesgo más de 50.000 millones de dólares en inversiones futuras”.

Oroinformacion.com