San Juan: Una casa, un juicio y un conflicto en puerta entre un reconocido empresario sanjuanino y una cámara minera
- 23 de febrero, 2024
El empresario utilizó sus redes sociales para exponer la lamentable situación que está atravesando. Los detalles de una causa judicial que trae tela para cortar.

“Gracias a la gente de CASEMI por llevarme a juicio como garante de la casa que fuera la sede del suelo de muchos pero el compromiso de uno”, escribió en sus redes sociales el empresario del rubro metalúrgico y reconocido piloto de carreras Fabrizio Benedetti. De esta manera, dio a conocer la situación judicial que está atravesando, donde un tecnicismo legal podría costarle millones de pesos.
La situación es la siguiente. Hace años, cuando Benedetti era presidente de CASEMI (Cámara Argentina de Servicios Mineros de San Juan), se alquiló una vivienda para que funcionara como sede de la entidad, en Capital. Conforme indicaron a Tiempo de San Juan, el contrato se firmó entre el propietario de la vivienda y Benedetti. Si bien se indicaba que la vivienda sería para el uso de la Cámara, el contrato se hizo con la persona y no con CASEMI.
Pasó el tiempo y en el medio Benedetti decide renunciar a la presidencia de la cámara, quedando otra persona en su lugar. En un momento desde la entidad se toma la decisión de trasladar la sede de lugar, por lo que se hace entrega del edificio a la inmobiliaria y es ahí donde comienza el inconveniente que desencadenó en un proceso judicial.
Fuentes relacionadas al caso indicaron que la vivienda fue entregada a la Inmobiliaria Reta, quien firmó el recibo de la misma, pero lo hizo en “disconformidad o haciendo reserva de derecho”. Esto se debe a una cláusula del contrato que hoy podría jugarle en contra al empresario, pese a no haber estado delante de la cámara en su momento.
El contrato establece, en una de sus cláusulas, que la vivienda debe ser entregada al propietario, pero esto no se hizo.
En la respuesta de demanda de Benedetti, se detalla que la vivienda se entrega en buen estado, pero el propietario no toma posesión del inmueble de inmediato, sino que lo hace al cabo de aproximadamente un año. En ese periodo de abandono, aparentemente hubo personas que ingresaron, vandalizaron y se llevaron artefactos, dejando la casa en un estado deplorable.
“La casa se devuelve sin el consentimiento del propietario y no se hicieron cargo de nada, quedando yo como único responsable”, detalla Benedetti.
Esto decantó en un proceso judicial que tendrá su audiencia final el mes que viene, donde se definirá el futuro de la causa. En medio, hubo un intento de llegar a un acuerdo entre el empresario y el propietario de la vivienda, pero desde CASEMI, conforme a lo que indican, solo manifestaron “apoyo moral, pero no se harían cargo de los gastos económicos”.
La estrategia de defensa de Benedetti es clara: demostrar que la vivienda se entregó en excelentes condiciones, pero que la desidia de un año hizo que resultara abandonada.
Pese a ello, la cláusula del contrato mencionada podría jugar en contra del empresario que, en caso de perder el juicio, deberá afrontar una demanda por daños y perjuicios sufridos por el dueño de la casa por las roturas y vandalismo, que le costaría alrededor de $5.600.000. Monto del cual desde CASEMI manifestaron que no se harán cargo.
Tiempo de San Juan