Las charlas de quincho y lo que dejó el festejo del Día de la Minería en Córdoba: no es oro todo lo que brilla

  • 13 de mayo, 2024
Córdoba fue sede del festejo principal por el Día de la Minería y dejó mucho para analizar.

Primero, lo que muchos se preguntaron: ¿por qué Córdoba? Porque allí se producen sales, cales, carbonatos, rocas, piedras y áridos fundamentales para las industrias argentinas del plástico, pintura, cemento, vidrio, cerámica, que de otro modo no podrían desarrollarse. Es la minería no metalífera, que permite ahorrar unos u$s4.000 millones por año en importaciones. “Los minerales de Córdoba son insumos de buena parte de la producción farmacéutica y también sirven para producir alimentos balanceados, además de su insustituible función en la mejora de los suelos para la producción agrícola”, dijo Alejandra Cardona, de CAEM, al abrir la gala ante más de 380 representantes de empresas mineras, funcionarios nacionales, provinciales, diplomáticos e invitados especiales.

“Córdoba es minería y la vamos a defender como al agro y a la industria automotriz”, completó el gobernador anfitrión, Martín Llaryora, que al inicio del festejo era el gran ausente, y de repente sorprendió a todos al ingresar por una puerta lateral del salón Alto Botánico. Como suele ocurrir en los eventos de empresarios mineros: “security first”. Y había motivos: días antes de este festejo grupos de ambientalistas locales celebraron el fallo de la Corte Suprema cordobesa que ratificó la prohibición de la minería metalífera en la provincia. Y se temían presencias indeseadas que finalmente no llegaron.

Por ahora, los cordobeses se tendrán que conformar con la extracción de cuarzo, feldespato, dolomita, yeso y fluorita, entre otros minerales de segunda y tercera generación. Lo que no les conforma a los mediterráneos es el parate de la obra pública de Javier Milei: por esa decisión se desplomó 50% la actividad minera, derrumbe solo comparable con la pandemia. No hay despidos, pero si demasiado acopio de mineral a un costo que en un par de meses dejará de ser prudente. Los 3.500 cordobeses afiliados a AOMA, en alerta.

Hoy no todo lo que brilla es oro en el sector minero (frase nunca dicha con más razón que ahora). El enorme potencial argentino en litio y cobre contrasta con la situación crítica de los metales preciosos, en caída libre por maduros y sin solución a la vista por ahora. Se necesitan u$s1.500 millones del exterior para más exploración. En Córdoba estimaron que a la Terra Argentea, a la Reina del Plata, le quedan solo tres años de oro y plata, con lo cual el próximo gobierno no contaría con 70% de las exportaciones mineras actuales, que superaron los u$s4.000 millones. Y para peor, si bien está en lenta recuperación, la producción de litio nacional ingresó hace meses en un limbo de paños fríos por el descenso del precio internacional de u$s84.000 a los actuales u$s20.000 la tonelada equivalente: de 47 proyectos más de la mitad están semiparalizados; hay suspensiones; revisión de los planes de factibilidad; los productores de insumos no encuentran mercados, y las minas que están en marcha no prevén acelerar la producción más de lo previsto. El 50% de la inversión en litio argentino es china. Los asiáticos llevan la punta de lanza a nivel mundial con la fabricación de autos eléctricos y no hay incentivos claros por ahora. En la reciente gira de Diana Mondino por Beijing se retomó la idea de integrar la cadena, con baterías propias de ion-litio. “Está en evaluación y estudio”, dijo un empresario que participó de esa charla. “Ya estaba previsto en un memorando anterior”. El problema para la batería argenta es que América Latina no es un gran mercado, en cambio Europa, sí.

Del Viejo Continente llegó hace varios años el CEO de uno de los proyectos cupríferos más prometedores de la región, que prevé industrializar el cobre para sumar valor. “Solo con el cobre podemos exportar el 20% de lo que hoy produce el campo, unos u$s10.000 millones por año”, ilusionó a sus interlocutores. Un auto a combustión requiere 5% de cobre, pero uno eléctrico más del 40%, explicó. ¿Cómo se logra? “Empecemos por el RIGI”, respondió. Los empresarios mineros le rezan más al Régimen que los chilenos a San Lorenzo, el patrono de la minería. Llaryora y su par sanjuanino, Marcelo Orrego, -también presente en la velada-, confirmaron que sus senadores votarán a favor de la ley bases. Pero como ya se dijo en estos Quinchos, no todo es brillo para la minería.

Un presidente empoderado de una cámara importante calmó los ánimos con el RIGI porque sabe que hay 3.500 pymes locales proveedoras del sector que pueden caer en desgracia, y que hay otros temas para discutir en el despacho de Luis Lucero la semana que viene. “Si se da el RIGI no esperen decisiones de inversión aceleradas, buenísimo que se apruebe, pero hay más cosas por resolver, como el atraso cambiario y la falta de competitividad con otros países de la región por los impuestos”, alertó.

Es que durante la cena circuló un rumor estresante para los que deben convencer a inversores internacionales de traer dólares a la Argentina: tras la Ley Bases, ¿suben las retenciones y las regalías a la minería? Hoy el doré paga 8% de retenciones, mientras que la plata, litio, plomo, cobre y zinc, tributan 4,5%. Y en cuanto a regalías provinciales siguen en 3% (más los aportes a fideicomisos y fondos fiduciarios, según cada provincia), pero desde el Sur soplan vientos que las empujan al 30%. “Seamos cautos con el RIGI”, remarcó el presidente empresario.

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