Catamarca/Media sanción a las adhesiones: Con acompañamiento opositor, el Gobierno consiguió el RIGI y regalías en Diputados

En el oficialismo tuvo tres abstenciones y una ausencia en la votación del RIGI. El peronista disidente Ávila fue consecuente con su posicionamiento, mientras que Fernando Baigorrí se abstuvo

El Gobierno consiguió ayer, con el acompañamiento de parte de la oposición, sacar de Diputados dos proyectos de adhesión que demandaron varias horas de debate y donde la minería fue el eje transversal: la sumatoria de Catamarca al Régimen de Incentivo a Grandes Inversiones (RIGI) incluido en la Ley Bases y el nuevo esquema de regalías mineras incorporado en el paquete fiscal, que lleva del 3 al 5 por ciento la percepción de esos fondos en los proyectos mineros que no hayan iniciado su construcción.

Durante la votación del RIGI algunos de los bloques de la oposición acompañaron al oficialismo donde hubo tres bajas y una ausencia: no levantaron sus manos el presidente del PJ capitalino Armando López Rodríguez, el camporista Pablo Castro y la representante del Partido Intransigente, Adriana Díaz, mientras que estuvo ausente Juan Carlos Ledesma.

Del espectro opositor, se abstuvieron el peronista disidente e impulsor de un despacho que rechazaba la adhesión, Hugo Ávila (Frente Amplio Catamarqueño), y el desarrollista Fernando Baigorrí (MID), quien se separó del bloque libertario.

Un detalle al margen. Hubo al menos dos pedidos de que la votación sea nominal. Es decir, consultando por nombre a cada legislador si aprobaba o rechazaba el proyecto. Estas solicitudes no fueron tenidas en cuenta, ya que se definió una votación por signo -dicho de otra forma, simplemente levantando la mano-, probablemente para no exponer a los diputados del bloque oficialista del Frente de Todos, ya que Díaz, por ejemplo, pidió que quede constancia en la versión taquigráfica el rechazo de su votación.

A lo largo del debate por la adhesión de Catamarca al RIGI, que se prolongó por más de tres horas, el foco estuvo puesto la actividad minera en la provincia y tangencialmente se tocó lo que fue La Alumbrera.

La oficialista Mónica Zalazar fue la encargada de fundamentar el porqué se debía aprobar el proyecto que propiciaba sumar a la Provincia al Régimen con beneficios fiscales, cambiarios y aduaneros. “Catamarca se encontraría en condiciones, está preparada para recibir todos estos grandes inversores, teniendo en cuenta que la provincia viene desarrollando y afianzando su política minera y en pos de convertirse en un punto atractivo para las grandes empresas nacionales e internacionales” dijo.

A su turno, Ávila consideró que se estaba “cometiendo un error histórico” y observó que “no hemos aprendido absolutamente nada de lo que significó la política minera que se implementó a partir de Bajo La Alumbrera”. “Jamás daría mi voto a favor de una ley que arrasa con varias leyes que están en plena vigencia a nivel nacional y a nivel provincial y que vulnera claramente la autonomía de la provincia de Catamarca”, agregó.

“Con el RIGI en nuestras manos tenemos la oportunidad, no de corregir los errores del pasado, sino de aprender la experiencia de aquellos errores”, dijo por su parte el radical Tiago Puente, mientras que el titular del bloque libertario, Adrián Brizuela rescató: “Se dijo que la experiencia con Alumbrera muestra el fracaso de la política minera, pero el hecho de que los recursos hayan sido usados de manera irresponsable por gobernadores e intendentes, hasta para pagar sueldos y gastos corrientes, no es responsabilidad de la minería per se, no es la herramienta en sí, sino el uso que se hace de ella”.

Cerca del final de este debate, el titular del bloque oficialista, Gustavo Aguirre, indicó: “Esta adhesión a al RIGI es necesario para poder consolidar el camino de desarrollo que se viene transitando y darle también a la provincia más competitividad”. Además, aclaró que “el efecto principal es garantizar a las empresas interesadas una estabilidad en los tributos provinciales, es decir que no le a crear nuevos impuestos”.

En cuanto al incremento de las regalías mineras para pasar del actual 3% a un 5 % sobre el valor ‘boca mina’ del mineral extraído exclusivamente respecto de proyectos mineros que no hubieran iniciado construcción correspondiente a la etapa de explotación, el debate no varió demasiado y se cuestionó la transparencia al Gobierno por el manejo y el destino de los recursos.

A diferencia de la votación del RIGI, en regalías el único de los presentes que no acompañó fue el opositor de extracción peronista Ávila.

El Esquiú