"San Juan hoy está a las puertas de su gran Vaca Muerta", sostuvo Penelli

Sebastián Penelli, Editor de Ámbito Financiero, compartió su visión acerca de cómo se observa la provincia de San Juan desde uno de los principales medios de comunicación de Buenos Aires.

Quien también oficia como Editor de Energy Report y moderador de Ámbito Debate pone de manifiesto: “Creo que lo que pasó aquí en San Juan hasta ahora en minería ha sido un gran paso, pero lo que se viene es increíble”.

Buenos días Sebastián ¿cómo estás? ¿Cómo está ese mediodía porteño?

Muchas gracias por el llamado Leo, la verdad un día hermoso acá en Buenos Aires: sol, cielo despejado, casi 20 grados de temperatura. Un muy lindo día, está llegando la primavera y se empieza a sentir.

Estás a cargo de uno de los medios de Buenos Aires que más se lee en San Juan, ¿cómo se ve nuestra provincia desde la llegada de BHP, desde la aprobación del RIGI, desde que Los Azules firmó el convenio con YPF Luz, el Tratado Binacional con Chile, etc.?

Bueno, mirá, lo que te voy a decir es que lo que le está sucediendo a San Juan y lo que le va a suceder a San Juan es algo esperable. Es algo que fue pasando en otros lugares de Argentina y en otras partes del mundo porque existe necesidad, planificación y una organización respecto de la necesidad de contar con recursos fundamentales para la transición energética. Y vamos a decirlo con claridad, San Juan es clave para abastecer esa necesidad.

Siempre has dicho que la historia o situación de San Juan te hace acordar a Vaca Muerta ¿por qué?

Yo digo que San Juan tiene obviamente la historia y la tradición minera, no la voy a decir porque los que la saben son más ustedes, pero sí la voy a comparar con lo que pasó con Vaca Muerta en el año 2008. San Juan hoy está a las puertas de su gran Vaca Muerta y de su gran potencial y posibilidad de realmente convertirse en una de las principales provincias, si no es que ya lo es, de la Argentina y de Cuyo. Porque no solo tiene los recursos, tiene la mano de obra, tiene los proveedores, tiene la industria, tiene la capacidad, la logística y tiene la cercanía con el océano Pacífico. Tiene un montón de cosas que van a posicionar a San Juan como una de las grandes provincias. Una provincia que ya no solo se visita, sino que empieza a estar en el radar permanente de todo el país.

¿Notas ese interés de la gente o empresas de Buenos Aires en la provincia de San Juan por lo que está ocurriendo a nivel proyectos y desarrollo minero?

Nosotros en Buenos Aires aprendimos, y no sólo por la minería, que tenemos que empezar a consumir más información y más comunicación de lo que sucede en provincias como San Juan. Tenemos que estar al tanto de lo que pasa en el día a día, nos interesamos, nos preocupamos, queremos ver desde acá, y no sólo de Buenos Aires, sino desde otras partes de la Argentina, cómo hacer para participar de lo que se va a venir en San Juan. Y vuelvo a lo de Vaca Muerta, lugar que conocí en 1998, y un lugar que cambió de una forma impresionante al día de hoy. Creo que lo que pasó aquí en San Juan hasta ahora en minería ha sido un gran paso, pero lo que se viene es increíble.

Muchas personas que han pasado por el programa, desde intendentes al presidente de la Cámara Minera, gerentes de proyectos y diferentes proveedores, me cuentan que reciben muchísimos mensajes para saber cómo hacen para venir a San Juan… a vos que estás vinculado con la industria minera ¿te pasa lo mismo?

Todo el tiempo. Sí, pasa muy seguido, me preguntan muchísimo ¿qué se puede hacer?, ¿dónde?, ¿con quién?, ¿con quién hay que hablar? Publico una nota y automáticamente son cientos los comentarios de “estuviste en Josemaría”, “estuviste en Los Azules”, “conociste Calingasta”, “fuiste a Barreal” ¿y dónde, con quién hablaste? Y todos quieren saber y conocer. Es muchísimo el interés. Pero también hay que ser cuidadoso. Para no crear falsas expectativas. Eso también en la industria es importante. Porque se hablan de millones de dólares de inversiones, se hablan de miles de puestos de trabajo, y no solo los sanjuaninos necesitan laburo.

Aquí hablamos de una línea de comunicación clara que pueda explicar los plazos ¿no?

Exacto, hay que ser responsable en el sentido de que cuando se promociona un proyecto grande, tiene que ser clara la información de las etapas en las cuales se encuentran. Porque hay muchos que están en exploración, hay muchos que están en exploración avanzada, hay otros que están en pre-construcción. Con lo cual sería un error generar falsas expectativas respecto de mayores inversiones, mayores puestos de trabajo, cuando en realidad todavía no son esas etapas. Entonces, ahí sí hay que ser cuidadoso con eso. Pero el porvenir está garantizado.

¿Cómo se vivió la aprobación del RIGI y qué lectura haces de la industria a partir de eso?

El RIGI yo creo que destrabó una situación que fue clave. En sí es una herramienta, vamos a decirle, de tipo legal-financiera, que va a servir y va a ser utilizada. Pero yo creo que lo más importante en el RIGI es el espíritu que despertó. El RIGI levanta la barrera para que se tomen decisiones desde afuera, desde el exterior. El RIGI sirve para que nuestros empresarios locales de Argentina puedan convencer a los empresarios extranjeros de hacer inversiones. ¿Por qué? Porque da un marco de estabilidad. Muchos hablan de la famosa seguridad jurídica. Yo creo que lo que hace, letra más, letra menos, monto más, monto menos, es sentar las bases para poder desarrollar proyectos de largo plazo. Esa es la clave.

El mensaje sería la importancia de proyectar a largo plazo, pero es algo que no solo beneficia a la industria minera, sino también a otras industrias…

Exactamente, le estamos mandando un mensaje a toda la industria, no solo a la minería, hidrocarburos y energía, sino también a la forestal, a la tecnológica y a otras industrias que han sumado al RIGI. Les está diciendo, nosotros queremos proyectar a largo plazo como argentinos y queremos que vengan y lo puedan hacer con nosotros. Nosotros tenemos los recursos para que el mundo siga funcionando. Bueno, me parece que está tomada la decisión a nivel global de que es el momento de empezar a jugar nuestras propias cartas y empezar a poner arriba de la mesa lo que nosotros tenemos. Y lo que nosotros tenemos no lo tiene nadie, porque esto es algo que se dice en todas las mesas donde uno participa, en las charlas, en las exposiciones, en las ferias.

Tenemos muchos recursos, pero hay que transformarlos en realidad…

Nosotros tenemos los vientos, tenemos el sol, tenemos todos los climas, tenemos casi todos los minerales, tenemos hidrocarburos, tenemos el mar, tenemos tanta ingeniería de recursos que sería desaprovechar una oportunidad. No poder abastecernos nosotros y al mundo adecuadamente, con la tecnología adecuada y de la forma que se preserven las comunidades y los territorios más adecuadas, sería desaprovecharlo. Y me parece que esta vez, de una vez por todas, me parece que lo vamos a aprovechar.

Me quedé con algo que dijiste recién y está bueno, porque por ahí el sanjuanino está obviamente muy pendiente de lo que pasa en relación a los proyectos, el cobre, pero el RIGI también beneficia o establece este marco que decías vos para otras industrias que el sanjuanino no está viendo que van a suceder también ¿o no?

Claramente, y una de esas es la tecnología. La industria de la tecnología, la de la economía del conocimiento es una de las que más va a generar. De hecho, hasta donde yo tengo entendido, el RIGI se va a usar en materia tecnológica para la instalación de un polo de inteligencia artificial que puede ser en la Patagonia, en algún centro de la Patagonia, que es una multinacional que tiene un interés muy importante en instalarse y estamos hablando de más de 200 millones de dólares que podrían invertir. Y no tiene nada que ver ni con la energía ni con la minería, tiene que ver exactamente con la tecnología. ¿Pero qué tecnología? Bueno, es una tecnología aplicada al uso de la energía, de la minería y sobre todo del hidrógeno.

Hace un tiempito estuviste en el proyecto Josemaría, y ahora hace unos días en una plataforma offshore a pocos kilómetros de las Islas Malvinas, contame esa experiencia…

Es así. Es la producción, en San Juan estuve en Josemaría y en Catamarca estuve en Bajo la Lumbrera. También vengo de conocer un proyecto de litio ubicado en Catamarca. Y unos días antes había estado en Tierra del Fuego en lo que es la plataforma offshore de producción de gas que se llama Fénix, de Total Energy. La verdad que fue una experiencia tremenda porque hay que viajar en helicóptero, hay que utilizar unos trajes especiales. Uno llega a la plataforma que está a 60 kilómetros de la línea costera y te deja ahí un helicóptero y quedas en el medio de la inmensidad del mar. La plataforma queda a 200 kilómetros de las Islas Malvinas y a 4.000 kilómetros de la Antártida. Es una plataforma que va a producir gas en el fin del mundo.

¿Y cómo es la vida en esta plataforma? ¿hay una relación con los proyectos mineros de San Juan ubicados a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar?

Y la verdad que es una experiencia tremenda porque ahí viven 140 personas que están trabajando, ultimando todos los detalles de la perforación para la producción del primer pozo de gas. Van a haber tres pozos, esos tres pozos van a generar 10 millones de metros cúbicos diarios de gas, que es el equivalente a sumarle entre un 8 % y un 9 % más del gas total que consume la Argentina. Esto sirve para dimensionar, quiere decir que cuando un argentino encienda una hornalla, una de cada diez veces, el gas va a ser de este lugar, de la plataforma más austral del mundo. Y las similitudes o coincidencias con la minería de alta montaña como la de San Juan son muchísimas. La seguridad, sobre todo, uno no puede dar un paso sino cumple todos y cada uno de los ítems de seguridad.

Y sobre todo el trabajo que hacen muchos argentinos…

Exactamente, en cuanto al laburo, es el sacrificio de aquellos que están ahí trabajando. Tanto sea en Josemaría, en Salar del Hombre Muerto, en la plataforma, en un parque eólico, en un parque solar. Todos los operarios y las operarias que están ahí trabajando es realmente asombroso y cómo le ponen el cuerpo y la pasión con lo que lo hacen. Son ingenieros, son electromecánicos, son lo que vos quieras, las profesiones que se te ocurran. Desde cocinero hasta manejar una grúa que puede llegar a pesar mil toneladas. Pero todos lo hacen con un entusiasmo y una pasión que te asombra. Porque la verdad, laburar a más de 4.000 metros o laburar en la inmensidad del Mar Austral, si vos no sentís pasión por lo que haces, no lo podrías hacer. La verdad que es impresionante.

Hace poquito moderaste un nuevo Ámbito Debate ¿Qué conclusiones sacas de lo que ocurrió?

La verdad es que, bueno, tuvimos una jornada de 12 speakers, 12 entrevistados distintos y entrevistadas, y la verdad que lo que nos dejó a todos es una sensación de optimismo. Fue una jornada de minería y energía, se habló de estos dos sectores en particular. Y como dice Roberto Cacciola, el presidente de CAEM, “hay que transformar la potencialidad en realidad”. La conclusión que saco es que la ecuación se está empezando a encuadrar, y los proyectos se están empezando a convertir en realidad. Me parece que, de una vez por todas, y me parece que, con acierto, se va a avanzar. La Argentina va a avanzar hacia el destino energético-minero que siempre tuvo, pero que nunca materializó.

Cámara Minera de San Juan