San Juan se prepara para despegar de la mano de su cobre de clase mundial
- 20 de agosto, 2025
Glencore y BHP lideran un plan de inversión sin precedentes en la provincia de San Juan y en la Argentina, con proyectos nuevos que escasean en el mundo.

Edwards Gajardo
Hoy es difícil dimensionar lo que será San Juan en el futuro, pero desde hace años la provincia se preparaba para este momento. La industria minera ya sabía que estos proyectos pondrían a San Juan no solo como una de las principales provincias argentinas, sino como un epicentro mundial de la actividad.
La solicitud de adhesión de El Pachón al RIGI y el avance de Vicuña, con inversiones que superarían los US$24,000 millones entre ambos, confirma lo que por mucho tiempo fue una promesa geológica: la provincia se transformará en un motor económico para Argentina y en un actor de peso en el mercado global.
Hace algunos días se anunció el pedido de adhesión de Pachón por US$9.500 millones, los que se suman a los US$15.000 millones que presentaría Vicuña en su documento de adhesión al régimen impositivo. Se trata de cifras desconocidas para el país y mucho más para Cuyo.
Lo más llamativo no son sólo estos montos, sino también desde dónde provienen. En el caso de El Pachón, la inversión es liderada por Glencore, una de las compañías mineras más importantes del mundo, ubicada en el top 8 global. Por su parte, el proyecto Vicuña es impulsado por un joint venture entre BHP, la minera número 1 del planeta, y Lundin Mining.
La participación de estos actores de talla mundial es una señal clave, porque no se trata de capitales especulativos, sino de empresas con experiencia, capacidad de desarrollo y que están acostumbradas a ponerse al frente de grandes proyectos. De hecho, tanto BHP como Glencore operan en Chile grandes yacimientos. Sin ir más lejos, la angloaustraliana opera Escondida, la mina con mayor producción de cobre a nivel mundial.
RIGI: La clave para la competitividad global de San Juan
Un factor fundamental para que estas inversiones se materialicen es el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). Este programa ha logrado que Argentina se vuelva competitiva frente a países que son parte del vecindario y que tienen una gran trayectoria minera, como Chile y Perú, que -justamente- ocupan el primer y segundo lugar en la producción mundial de cobre.
El RIGI permite reducir la carga impositiva para estos proyectos por debajo del 40%, un porcentaje muy atractivo si se compara con el 45% de Chile y el 42% de Perú. Para un país como Argentina, sin una tradición minera consolidada y con antecedentes internacionales que generan desconfianza, dar estas señales es vital. Las inversiones en minería son extremadamente altas y su recuperación es lenta, por lo que no se realizan en cualquier lugar o bajo cualquier condición.
El valor de los proyectos "greenfield"
En medio de una creciente demanda global de cobre, impulsada por la transición energética, el desarrollo de nuevos proyectos se ha vuelto crucial. El problema es que los grandes descubrimientos de yacimientos son muy escasos. Es por eso que estas inversiones son tan históricas y significativas para Argentina, pero también hay que decir que en la actualidad tampoco abundan en el mundo del cobre a nivel global. La mayoría de las inversiones en países como Chile o Perú corresponden a ampliaciones de proyectos que ya están en producción.
Aunque proyectos como El Pachón y Vicuña han llevado décadas de exploración, se les puede considerar dentro de la categoría "greenfield" por ser desarrollos completamente nuevos en lo que es la etapa de producción. Esto les otorga un valor estratégico enorme para las grandes compañías mineras que buscan asegurar el suministro a largo plazo.
La magnitud de la inversión y la avanzada etapa de desarrollo de los proyectos sanjuaninos los pone en una posición de privilegio en un mercado global en el que no hay nuevos descubrimientos de este tipo. Es que a los mencionados proyectos, también se suma Los Azules, de McEwen Copper, que proyecta una yacimiento con una inversión de US$2.700 millones, lo que lleva el nivel de inversión en nuevos proyectos cerca de los US$30.000 millones en el mediano plazo. Esto claramente posiciona a San Juan en un nivel que todavía la Argentina no termina de dimensionar. Adicionalmente, la provincia cuenta con proyectos en exploración avanzada con resultados prometedores, como es el caso de Altar y Lunahuasi, que demuestran un potencial geológico y una cadena de desarrollo continua que pueden poner llevar a San Juan a una posición aún más trascendente.
Cifras que marcan un récord y superan a los gigantes
Para tener aún más claro lo que está sucediendo en San Juan se puede mirar al otro lado de la cordillera, donde Chile tiene en carpeta 51 proyectos con una inversión de más de US$81.000 millones. Claramente es más que lo que se espera en la Argentina, pero al mirarlo de manera individual, nos encontramos que entre las inversiones más altas está la Expansión de la mina El Abra con US$7,511 millones, lo que sería sólo la mitad de Vicuña, el distrito en el que se pondrá en producción Josemaría y Filo del Sol.
Para ayudar a ponerlo aún más en perspectiva, la inversión de El Pachón por sí sola (US$9,500 millones) es más del doble del total de los US$4,500 millones que la Unión Europea ha destinado a 47 proyectos mineros estratégicos en todo el continente. Mientras Europa impulsa múltiples proyectos para asegurar su suministro de minerales, San Juan cuenta con yacimientos tan ricos que una sola inversión individual supera a la inversión colectiva de un continente entero. Esto subraya la relevancia de la provincia en la estrategia global de minerales, especialmente de cara a la transición energética.
En la historia de San Juan, el futuro se está escribiendo en el presente, impulsado por el cobre. Con inversiones históricas y el respaldo de las principales mineras del mundo, la provincia se prepara para un despegue económico que, aunque aún no podemos dimensionar por completo, la convertirá en un motor clave para la economía de la Argentina. Miremos con atención a San Juan, porque está a punto de convertirse en un epicentro mundial de la industria minera
Mdzol.com