Catamarca: Ajuste laboral consentido

DE UN PLUMAZO. LA EMPRESA MINERA LIVENT DEJÓ EN LA CALLE a MEDIO MILLAR DE TRABAJADORES EN UNA SEMANA. La empresa minera Livent, a cargo de la explotación de litio en el Salar del Hombre Muerto, en Antofagasta de la Sierra, sigue haciendo de las suyas. En las últimas horas se conoció que dio por concluidos los contratos de

DE UN PLUMAZO. LA EMPRESA MINERA LIVENT DEJÓ EN LA CALLE a MEDIO MILLAR DE TRABAJADORES EN UNA SEMANA.

La empresa minera Livent, a cargo de la explotación de litio en el Salar del Hombre Muerto, en Antofagasta de la Sierra, sigue haciendo de las suyas. En las últimas horas se conoció que dio por concluidos los contratos de 100 trabajadores que cumplían tareas en la obra de los piletones de depósito del material que la firma extrae del salar.

Esta nueva tanda de despidos se suma a la anterior, de hace una semana, de otros 400 trabajadores que también pertenecen a la constructora Mogetta ?que forma parte de la UTE con la multinacional y otras empresas- y que estaban asignados a la obra del controvertido acueducto en el río Los Patos.

Pasando en limpio: en menos de 10 días, Livent dejó en la calle a medio millar de operarios, la mayor parte de ellos catamarqueños y oriundos del Oeste provincial. Un golpe durísimo para el sostenimiento de esas familias y la economía regional. Más aún en este momento que vive el país y el mundo.

Lo curioso es que Livent metió mano a la plantilla salarial cuando la actividad minera está encuadrada en las excepciones dispuestas por el Gobierno nacional en el marco del aislamiento preventivo y obligatorio por el coronavirus.

En efecto, según la decisión administrativa 429/20, el jefe de Gabinete de Ministros del Ejecutivo nacional amplió el listado de actividades y servicios declarados esenciales en la emergencia, en los términos previstos en el Decreto N° 297/20. El punto 2º dice textualmente: "Actividades vinculadas con la producción, distribución y comercialización forestal y minera". De manera que Livent podría continuar con sus actividades, pero sin embargo decidió cortar el hilo por lo más fino.

El ajuste de la compañía de capitales estadounidenses representa una contradicción esencial para la política minera de Catamarca. Sencillamente porque uno de los argumentos centrales de las autoridades provinciales para viabilizar la explotación del litio fue la creación de puestos de trabajo que tal inversión traía aparejada. Tal justificación se desmoronó en una semana.

De hecho, este medio millar de despidos contó con un silencio cómplice de la política, aunque con un apoyo tan explícito como incomprensible de parte del sindicalismo. Fue nada menos que el secretario general de la UOCRA Catamarca, Víctor Hugo Brandán, quien la semana pasada le dio a la multinacional minera el plácet que necesitaba para el desguace de los primeros 400 trabajadores de la obra del acueducto.

"Se tomaron estas medidas fundamentalmente para cuidar la salud de la gente; prefiero un trabajador suspendido o despedido, esperando a que se reabra la mina, a tener un trabajador enfermo", expresó el sindicalista apenas conocida la noticia del ajuste laboral en la puna.

El pobre Brandán dijo estar confiado en que Livent cumplirá el "compromiso" con los despedidos respecto a que "una vez que el proyecto se reanude, sean incorporados los mismos trabajadores". "Eso vamos a exigir", afirmó.

Es de imaginar lo que habrán pensado los afiliados del gremio de la construcción que quedaron sin trabajo en Antofagasta de la Sierra, quienes esperaban al menos que lo primero que hiciera su jefe sindical fuera salir a defenderlos a ellos y no a justificar a la empresa. Con gremialistas como él, mejor tratar directamente con la patronal.

Ahora habría que esperar que tanto el gremio de la construcción como la Intersindical Minera exigieran al Gobierno provincial que a su vez obligue a la empresa a seguir trabajando, en vistas de que la minería fue declarada una "actividad económica esencial" por el Gobierno nacional en esta emergencia sanitaria.

Es decir, no hay razones objetivas para que ni la obra del acueducto en el río Los Patos como la de los piletones en inmediaciones de la planta de Livent bajen el telón hasta nuevo aviso. Por las mismas razones por las cuales pueden seguir trabajando otros sectores de la producción y de la industria en Argentina.

Si de cuidar las fuentes de trabajo en Catamarca se trata, esta es la oportunidad de ejercer el poder. La ley está del lado de la Provincia.

El Ancasti