Mendoza/Canadienses compraron una mina de uranio en Malargüe: ¿qué pueden hacer con ella hoy?
- 20 de junio, 2023
Se trata de Huemul, un yacimiento que tuvo dos décadas de producción y que está íntimamente relacionado con la historia de Sierra Pintada, que se encuentra en proceso de remediación.
Los compradores destacan a Malargüe como una zona "amigable" con la minería.
Edu Gajardo
La canadiense Consolidated Uranium anunció que adquirió el 100% de la mina Huemul-Agua Botada en el departamento de Malargüe, un yacimiento de uranio que estuvo en producción durante dos décadas hasta mediados de los 70. La empresa destaca a la comuna como "amigable" con la minería y se muestra optimista, pero con la 7.722 en su forma actual tiene grandes restricciones.
Según informó la misma compañía, entró en dos acuerdos de compra para la mina de uranio, vanadio y cobre y el terreno prospectivo circundante por un total de 27.350 hectáreas.
De acuerdo al comunicado difundido, el presidente y director ejecutivo, Philip Williams, aseguró que la Argentina "es un país que presenta importantes oportunidades" y desde la compañía se definió a Malargüe como un lugar "amigable con la minería", a diferencia del resto de la provincia. "Más allá de los méritos técnicos, su ubicación en el departamento de Malargüe, amigable con la minería, fue una consideración importante en hacer la adquisición", señalaron.
Sin embargo, en información difundida por Minería y Desarollo, no se hizo referencia a que, más allá de que el departamento sureño es más amigable con la actividad, tiene las misma restricciones que el resto de los departamentos.
En un comunicado que se puede calificar de optimista, Consolidated Uranium habla de recuperar un yacimiento que no tiene operaciones desde 1975, y realizar el proceso de exploración. Hace casi 20 años se hicieron estudios radiométricos, entre otros, pero no se perforó, lo que tampoco se pudo hacer luego por la entrada en vigencia de la Ley 7.722 que bloqueó todo intento de avance minero.
Las restricciones
Argentina importa uranio desde finales de los 90, en circunstancias que existe el mineral en el país y específicamente en Mendoza. Es usado en los reactores nucleares que generan parte de la electricidad que se consume en la Argentina y poder operar se trae uranio desde el exterior.
Consultado por Memo, el geólogo Eddy Lavandaio dijo que yacimientos del tipo de Huemul hay varios en la zona central sur de Malargüe, algunos con cobre (oxidados) y uranio, mientras que otros solamente con cobre con algo de vanadio. Señaló que en general son yacimientos chicos que no han sido explorados y por lo tanto no tienen recursos cubicados.
La historia de Huemul está ligada a otro yacimiento de uranio que resulta emblemático para Mendoza como es Sierra Pintada, el cual se encuentra en proceso de remediación. Cuando se agotó el material del que se tenía conocimiento en el mencionado yacimiento, se comenzó a procesar mineral de Sierra Pintada. Eso sucedió hasta que éste último yacimiento levantó su propia planta de procesamiento y se terminó de cerrar Huemul.
Se extrajeron aproximadamente 130.000 toneladas de la mina Huemul, hasta que se agotó el mineral que se conocía, por lo que necesariamente para poner en marcha una nueva explotación se necesita explorar. Los expertos no descartan que se pueda encontrar más uranio, pero por tratarse de Mendoza esa no es la duda más importante.
El Ejecutivo provincial impulsó dos proyectos de exploración minera después de 15 años y en uno puso el dinero para realizarla a través de PCR, ahora transformada en Impulsa Mendoza. Podría también apoyar una exploración en una mina de uranio, pero no podría prometer lo mismo que promete con Hierro Indio y Cerro Amarillo.
Es que a diferencia de la explotación del cobre que -de permitirlo el tipo de material encontrado en un yacimiento- se puede avanzar con un proceso de flotación (que se enmarca en las restricciones de la Ley 7.722), se limitan las opciones para permitir la explotación con la norma tal cual está actualmente.
Para disolver los minerales de uranio el método que se usa en el mundo es ácido sulfúrico, uno de los elementos que está expresamente prohibido por la ley antiminera, lo que hace casi imposible una posible explotación con esa norma en vigencia. Como en todos estos casos, hay alguna opción pero ponen en duda la factibilidad económica. Lo curioso es que actualmente se está usando ácido sulfúrico en Sierra Pintada, pero en el proceso de remediación, para lo cual se apuntó a una autorización judicial específica y las palabras de las autoridades (en ese momento Alfredo Cornejo), de negar cualquier intento de retomar la explotación del uranio.
Por eso, más allá de la posible exploración que podría solicitar y realizar Consolidated Uranium, va a tener una piedra de tope que es el ácido sulfúrico, el cual está prohibido en Mendoza. Lo curioso es que en el pasado no sólo se usó el ácido, sino que había plantas de fabricación de ácido justamente en estos yacimientos de uranio que estamos mencionando.
Los expertos recalcan lo ilógico que resulta tener uranio en el país y no explotarlo para los reactores que lo necesitan y en cambio incurrir en gastos de importación con todo lo que eso implica y lo que genera para una economía como la Argentina, donde cada dólar que se paga al exterior es un golpe para el Banco Central.
Actualidad
Huemul fue la primera mina productora de uranio del país y en 2018 una parte de su operación es hoy un parque público con juegos para niños. Esta reconversión se hizo con un préstamo del Banco Mundial de US$ 30 millones.
Fue el primero de otros proyectos similares llevados adelante por la Comisión Nacional de Energía Atómica, organismo que se encargaba de la explotación de la mina.
El parque en cuestión se levantó en la zona en la que la entidad procesó mineral de uranio entre 1954 y 1986 en lo que fue el Complejo Fabril Malargüe, proveniente de Huemul y Sierra Pintada.
Memo