Mendoza/Ley 7722: Una ley que se debe perfeccionar - Por Pablo Priore
- 2 de diciembre, 2019
La producción de minerales no solo es lícita, sino que, con estándares internacionales es necesaria para el desarrollo económico y social. Por Pablo Priore - Abogado. Senador provincial del PRO La ley 7722 fue sancionada por un reclamo concreto realizado por un sector determinado y en circunstancias det
La producción de minerales no solo es lícita, sino que, con estándares internacionales es necesaria para el desarrollo económico y social.
Por Pablo Priore - Abogado. Senador provincial del PRO
La ley 7722 fue sancionada por un reclamo concreto realizado por un sector determinado y en circunstancias determinadas. En la época de la sanción de aquella ley -2007- los mendocinos estábamos desinformados sobre la actividad minera, y aquella duda sobre su implementación quizás dada por la falta de experiencias suficientes, nos llevó a dictar una norma prohibitiva.
Hoy, después de 12 años de haber visitado ciudades mineras, de haber escuchado todos los argumentos a favor y en contra sobre la minería, principalmente en audiencias públicas de emprendimientos mineros y contando con nuevas y mejores herramientas de protección de los recursos naturales, con nuevas áreas de reserva natural, y con una ley específica de protección de los glaciares, tenemos otra visión. Hemos concluido fundadamente en que el desarrollo de la producción de minerales no solo que es imperiosa como actividad noble y lícita, sino que, realizada dentro de los estándares internacionales y con estrictos controles, es necesaria para el desarrollo económico y social de Mendoza.
No quiere decir que la ley 7722 sea inconstitucional, o que sin ella se contaminará el agua; justamente lo contrario. Necesitamos una ley de avanzada que se adapte a la realidad -como bien lo mencionaran algunos de los jueces de la Corte al sentenciar sobre la Ley 7722-; que sea totalmente superadora, que no solo cuide el agua, sino el ambiente en su totalidad. Que destine fondos específicos a mejorar la infraestructura hídrica y que garantice un eficiente desarrollo y gestión de nuestros recursos minerales. Los mismos recursos minerales que de cierta manera, compartimos con Chile por estar en el mismo cordón geológico y cordillerano. Ese país vecino que trabaja el cobre desde hace 100 años y que lo llevó a convertirse en el primer productor mundial de cobre.
Ese cobre que utilizamos a diario en cada celular, computadora, y en cada cable que transporta nuestra energía y que, junto con otros minerales, serían útiles para que podamos darle un valor agregado e implementarlos en la industrialización de paneles solares y otras tecnologías que nos permitan contar con una matriz energética eficiente y sustentable. Lo paradójico es que esa misma tecnología posiblemente en el futuro avance de tal manera que termine por remplazar a los minerales que se utilizan hoy, y nos quedemos con millones de toneladas de cobre inservibles y con el recuerdo de lo que pudo ser.
En Mendoza tenemos los recursos y la tecnología para realizar una minería sustentable. Así lo entendió el 88% del electorado que, en la última elección, votó a los dos candidatos a gobernador que tuvieron entre sus propuestas de campaña el desarrollo sostenible de la minería.
Como sociedad que respeta sus instituciones, debemos exigir que quienes nos gobiernen, cumplan con sus propuestas y será deber nuestro como ciudadanos coadyuvar y trabajar para que tengamos una minería sustentable, controlada, que genere empleo de calidad, inversiones genuinas y los recursos suficientes para dotar de eficiencia al uso, distribución y consumo del agua.
Diario Los Andes