Mendoza/Paramillos: un viaje turístico en el tiempo, con la la primera explotación minera de la República Argentina.
- 29 de junio, 2020
Una localidad enclavada en la montaña con una enorme variedad de atracciones relativas a la cultura popular, historia y turismo. Por: EXEQUIEL NACEVICH La localidad de Paramillos se ubica a 83 kilómetros hacia el noroeste de la ciudad de Mendoza, en plena precordillera. Está ubicada en el depart
Una localidad enclavada en la montaña con una enorme variedad de atracciones relativas a la cultura popular, historia y turismo.
Por: EXEQUIEL NACEVICH
La localidad de Paramillos se ubica a 83 kilómetros hacia el noroeste de la ciudad de Mendoza, en plena precordillera. Está ubicada en el departamento de Las Heras y es uno de los destinos turísticos y culturales más visitados, junto a Villavicencio y Uspallata. En Paramillos, religión, historia y turismo conviven en un mismo lugar.
A este destino se accede por la ya conocida RN 52. Un hermoso camino de tierra, con curvas y paisajes memorables, nos conduce hasta la cruz, donde empieza un verdadero y variado recorrido.
Las ruinas de las minas
Las ruinas de las antiguas minas de plomo, plata y zinc, en Paramillos, Uspallata materializan un patrimonio industrial histórico único. Estas minas son consideradas la primera explotación minera de la República Argentina. El nombre viene de un diminutivo español de páramo o lugar desolado.
Desde principios del siglo XVII y hasta mediados del XVIII los Jesuitas encararon su primera explotación sistemática minera. A mediados de 1750, trabajaban allí más de 4500 nativos, dando lugar a una fase de explotación intensiva, que duró unos 30 años. En el conjunto se destaca un edificio, dentro del cual hay un gran pozo, de aproximadamente 90 metros de profundidad, denominado pique «Gobernador», que fue construido aproximadamente en 1888. De éste se extraía el mineral, que era transportado a la planta de concentración ubicada a pocos metros, en la que se hacía la molienda y separación por decantación. Las ruinas abandonadas son visitadas asiduamente por turistas e interesados en el pasado minero de la provincia de Mendoza.
Charles Darwin en Paramillos
El famoso científico, Charles Darwin, emprendió a principios del siglo XIX una serie de viajes en el HMS Beagle. Cuando el barco llegaba a tierra, éste bajaba e investigaba la zona.
Después de varias escalas, en marzo de 1835, el HMS Beagle recaló en el puerto de Valparaíso. Inmediatamente, Darwin cruzó la Cordillera de los Andes, realizando una descripción geológica. Estudió el perfil de la Sierra de Uspallata y, con su agudo poder de observación, describió una secuencia sedimentaria, con más de 52 troncos petrificados.
Los detalló minuciosamente, al igual que a los sedimentos circundantes, caracterizados por su alto contenido volcánico. Como era su carácter, intentó interpretar los procesos que habrían causado ese escenario geológico, y concluyó que los árboles habían quedado sepultados como resultado de fenómenos sucedidos en las costas del Atlántico, durante el período Terciario.
A partir de este importante aporte a la humanidad, se ha levantado un monumento a Darwin en el lugar, convirtiendo esta zona en un centro de atracción de religión, historia y turismo.
El paso del Ejército de Los Andes
Por esta región atravesó una de las columnas del Ejército de Los Andes, cuando se inició la epopeya libertadora del sur del continente. En 1817, esa columna, que era una de las principales del Ejército del General San Martín, estaba al mando del General Juan Gregorio de Las Heras, quien se dirigió a Chile por el camino de Uspallata.
Crucifijo del Gaucho Cubillos
En las ruinas de las minas de Paramillos, en las cercanías de los antiguos corrales, un crucifijo metálico, múltiples flores de plástico y ofrendas, recuerdan el lugar dónde, según la tradición, fue muerto por la policía Juan Francisco Cubillos, conocido popularmente como el Gaucho Cubillos. El sitio es oratorio de los promesantes que, de todo el país, demandan la mediación de ayuda del "santo popular", perpetuando su mito. Murió a los 27 años, en un confuso episodio. Según una versión, fue asesinado a tiros y puñaladas, mientras dormía en un rancho. Según otra, fue muerto en una pulpería, donde ofreció brava resistencia a sus captores. Después de fallecido, los mineros no permitieron que los policías se llevaran el cadáver de Cubillos, y lo velaron en una notable demostración de afecto y fervor popular.
Por todas las atracciones mencionadas, Paramillos se convierte en un destino ideal para un día de turismo en Mendoza. Pero no sólo de esparcimiento, porque, habida cuenta de lo que acabamos de contar, Paramillos es, definitivamente, un centro de aprendizaje de cultura popular, historia y turismo.
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