En Andacollo los vecinos temen que el líquido que llega al río esté contaminado. Desde la empresa concesionaria se aseguró que es agua de lluvia. Reclaman al gobierno provincial que extreme los controles para garantizar la salud de los vecinos. La minera Trident Southern explicó que pidió autorización para realizar el zanjeo hacia el arroyo.
Un curso de agua que desciendo en Andacollo desde las laderas al arroyo El Torreón y desde allí al río Neuquén despertó la preocupación de los vecinos que temen que podría tratarse de aguas residuales de relave de la planta de procesamiento de oro y plata ubicada en esa zona. Pero desde la empresa negaron ser los responsables del escurrimiento dado que indicaron que no están realizando actividades mineras.
La preocupación en la comunidad de Andacollo se debe a que 300 metros aguas abajo se encuentra la bocatoma de la planta potabilizadora desde donde se abastece de agua a la localidad.
El hecho se habría registrado el jueves y puso en alerta a los vecinos, dado que las aguas residuales tienen que ser contenidas en un dique y de ninguna manera ser vertidas a los cursos de agua, pero los vecinos denunciaron que los controles por parte de Policía Minera, Cormine y Recursos Hídricos son inexistentes.
Desde el área de comunicaciones de la empresa Trident Southern Explorations se desmintió que se trate de aguas residuales y llevó tranquilidad a la comunidad. Explicaron que existe un dique de relave abandonado hace más de tres años y para evitar que con las lluvias colapse se ejecutó un canal derivador que transporta el agua de lluvia que allí se acumula a los arroyos existentes en la región.
Por otra parte sostuvieron que como la empresa no está procesando minerales, en agua del interior minas se extrae para evitar que las mismas se inunden y esta agua se utiliza para riego de los caminos de acceso a la misma mina.
Desde la firma aseguraron que Medio Ambiente, Cormine y Recursos Hídricos están monitoreando los trabajos que se realizan. Sin embargo los vecinos insistieron en que deben efectuarse controles rigurosos por los problemas que se puede causar a la salud de la población.
El año pasado Trident Southern Explorations tomó posesión del proyecto de la fallida Minera Andacollo Gold SA (Magsa) cuya quiebra fue declarada días atrás.
La concesionaria de la mina detalló que se trata de agua acumulada en diques abandonados por no estar la mina aún en proceso productivo.
Diario Río Negro