Estudio revela que se puede extraer oro de 22 quilates estos dispositivos tecnológicos que normalmente desechamos
- 28 de marzo, 2025
Un reciente estudio reveló que es posible extraer oro de la basura tecnológica,

lo que favorece la transición hacia una economía circular. Este proceso permite recuperar y reutilizar los materiales valiosos de los residuos electrónicos, promoviendo así la sostenibilidad
Por Marlon Carrasco Freitas
Cada año, Perú enfrenta una creciente acumulación de residuos electrónicos. En 2022, el país alcanzó más de 14 mil 700 toneladas de basura tecnológica valorizada, lo que demuestra el volumen de desechos generados por dispositivos obsoletos, como teléfonos, computadoras y electrodomésticos. Esta cifra es solo una parte de un problema global, que ha llevado a los investigadores a mirar más allá del aparente “desperdicio” de estos dispositivos.
Según un estudio realizado por investigadores de ETH Zurich, muchos de los dispositivos electrónicos desechados, como placas base, chips y circuitos, contienen pequeñas pero valiosas cantidades de oro. Este metal precioso, esencial para la fabricación de componentes electrónicos debido a su alta conductividad y resistencia a la corrosión, se encuentra en aparatos obsoletos que la mayoría de las personas tienden a desechar sin pensar en su valor oculto.
De acuerdo con el estudio, se ha demostrado que, a partir de apenas 20 placas base antiguas, es posible extraer hasta 450 miligramos de oro de 22 quilates, lo que convierte estos desechos en una fuente potencial de recursos valiosos. En ese sentido, dicho hallazgo resalta la oportunidad de reciclar metales preciosos de estos dispositivos, lo que podría tener un impacto significativo en la economía global y, particularmente, en los países en desarrollo.
¿Cómo extraer oro de manera ecológica?
El proceso para recuperar el oro de aparatos tecnológicos en desuso desarrollado por ETH Zurich se basa en el uso de esponjas proteicas hechas a partir de subproductos de la industria alimentaria, específicamente de la industria láctea. Estas esponjas, denominadas aerogeles, tienen la capacidad de captar iones de oro presentes en soluciones químicas derivadas de los dispositivos electrónicos disueltos. Después de sumergir las esponjas en estas soluciones, los investigadores utilizan un tratamiento térmico para convertir la sustancia en pequeñas pepitas, demostrando que la basura electrónica puede transformarse en oro puro.
Este método no solo tiene la ventaja de ser más eficiente y seguro que los procesos tradicionales de extracción de oro, sino que también es mucho menos dañino para el medio ambiente. A diferencia de la minería convencional, que a menudo utiliza productos químicos peligrosos y consume grandes cantidades de energía, este proceso ecológico permite recuperar oro con un menor impacto ambiental.
Residuos electrónicos en Perú
En Perú, la valorización de los residuos electrónicos está comenzando a ganar terreno. En 2022, el país logró valorar más de 14 mil 700 toneladas de residuos de aparatos electrónicos, un aumento significativo con respecto a años anteriores. Sin embargo, este avance sigue siendo insuficiente, ya que, según datos del Ministerio del Ambiente (Minam), el país genera cada año una cantidad considerable de desechos electrónicos que no siempre se gestionan adecuadamente.
A pesar de los esfuerzos para mejorar la recolección y tratamiento de residuos electrónicos en Perú, la situación sigue siendo preocupante. De las aproximadamente 50 mil toneladas de residuos electrónicos generadas anualmente en el país, solo una pequeña fracción es reciclada correctamente. Este bajo nivel de reciclaje resalta la necesidad de mejorar las infraestructuras y los programas de concienciación para fomentar un manejo adecuado de estos residuos. Además, el incremento de la generación de residuos electrónicos requiere políticas más eficaces para garantizar que estos recursos no se pierdan, sino que se utilicen de manera responsable.
Este desafío global, que también afecta a Perú, subraya la importancia de desarrollar tecnologías innovadoras como la que propone ETH Zurich, que podrían transformar la forma en que percibimos y gestionamos nuestros desechos electrónicos, no solo como basura, sino como una fuente valiosa de materiales preciosos.
El reciclaje de metales preciosos de los residuos electrónicos no solo tiene beneficios ecológicos, sino que también ofrece nuevas oportunidades laborales. A medida que la demanda de reciclaje de estos materiales crece, surge la necesidad de contar con profesionales especializados en la gestión de residuos, la química y la tecnología de reciclaje que contribuya a la economía verde.
¿Dónde reciclar la basura electrónica?
Los aparatos electrónicos que ya no usas, como un celular viejo o una licuadora rota, pueden representar un peligro para la salud de tu familia y el medio ambiente si los dejas guardados en casa? Aunque estos objetos ya no estén en funcionamiento, su correcto manejo es fundamental para evitar daños graves.
Los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) contienen materiales complejos que, si no se gestionan adecuadamente, pueden liberar sustancias tóxicas como mercurio, cadmio, cromo y plomo. Estos elementos, al ser liberados en condiciones inapropiadas, pueden poner en riesgo tanto la salud humana como el equilibrio ambiental.
Según el informe The Global E-Waste Monitor de Naciones Unidas, el volumen global de RAEE alcanzó un récord de más de 53,6 millones de toneladas en 2019. En Perú, el Ministerio del Ambiente calcula que cada año se generan 205 mil toneladas de estos residuos, lo que resalta la urgencia de adoptar medidas efectivas para su manejo adecuado.
“Al reciclarlos correctamente podemos evitar la extracción de nuevas materias primas de la naturaleza y ahorrar todos los recursos energéticos de este proceso, debido a que más del 90 % de un teléfono móvil en desuso puede recuperarse y aprovecharse”, refirió Rosa Bonilla, jefa de Gestión de Reputación y Desarrollo Sostenible de Entel en conversacion con Andina.
Infobae