Salta es el tercer distrito con más inversión en exploración

Con un presupuesto total de US$28 millones en 2021, se duplicó lo del año pasado. Por cada millón de dólares destinado a descubrir recursos mineros se crean 28 empleos.

 

Este año en Salta el presupuesto en exploración minera fue de 28 millones de dólares, según un informe de la consultora Standard & Poor’s que dieron a conocer desde el Grupo de Empresas Mineras Exploradoras de Argentina (Gemera). Comparado con 2020, hubo un crecimiento del 103% en los gastos previstos por las mineras para descubrir nuevos recursos en la provincia y en relación a 2019, la inversión cayó en un 34%. En el año anterior a la llegada de la pandemia de la COVID-19 al país se volcaron US$42.700.0000 en exploración en Salta y en 2018, US$33.400.000 (un 16% más que este año).

Es la tercera provincia donde se destinan más recursos para la exploración, que es el pilar de la industria minera y lo que define, en gran medida, las posibilidades de desarrollo de la actividad. San Juan y Santa Cruz lideran el ranking de distritos donde se vuelcan la mayor cantidad de fondos en ese rubro.

En 2021, el 12% de los recursos totales con fines de exploración se invirtieron en Salta; en Santa Cruz, un 19% y en San Juan, un 41%.

De acuerdo al estudio de Standard & Poor’s, este año se destinaron en todas las provincias mineras del país US$226.800.000 para detectar posibles yacimientos o ampliar los ya existentes. Significa un crecimiento del 46,6% en relación a 2020 (cuando se gastó US$154,7 millones), que estuvo signado por la paralización de actividades ante el avance del coronavirus. Y si la comparación es con 2019, que tuvo un presupuesto de US$240 millones, la inversión cayó un 5,5%, un poco menos que en 2018, cuando llegó a los US$241 millones. Sin embargo, este año hubo un significativo crecimiento con respecto a 2017 (US$209 millones), 2016 (US$151 millones) y 2015 (US$124 millones).

Panorama

El titular de Gemera, Mario Hernández, quien también es presidente de la Cámara de Minería de San Juan, contó al presentar el balance que la inversión en exploración entre 2015 y 2021 en promedio anual fue de US$192 millones y representó el 2,8% en inversión extranjera directa.

“Es un valor que con los años ha ido sumando, pero no es poco comparado con el resto de los sectores económicos. Hoy estamos en 3,2% de inversión extranjera”, destacó el dirigente empresarial.

“Exploración y descubrimiento equivale a investigación y desarrollo del resto de las industrias. Lo otro inherente a esta etapa es que, a diferencia de la etapa de construcción o producción, en la exploración no hay una gran visibilización en los resultados. Por ahí no se aprecia la cantidad de gente real que está involucrada. La exploración viene a aumentar la riqueza del país. El crecimiento que tienen los recursos, en la primera etapa y el ajuste que va generándose después de una reserva cuando esos recursos se ponen en un plan de minado”, señaló.

Detalló que por cada millón de dólares que se invierte en exploración quedan en el país US$554.000 entre gastos, bienes y servicios, salarios e impuestos. De ese monto, US$204.000 corresponden a sueldos. Se generan, además, 11 empleos directos y 17 indirectos por año.

“Si hablamos del orden de US$300 millones de inversión total en exploración durante este año, podemos ver cómo impacta positivamente en términos de empleos directos e indirectos además de pagar US$ 221.600 (más del 22%) en impuestos y cargas sociales. Eso es lo que le está generando de dinero al fisco”, resaltó Hernández.

Cuando todo arranca

La relación de un desarrollo minero con su entorno se inicia en forma ineludible con la ubicación en el terreno del yacimiento de los minerales que por diversos procesos geológicos se han acumulado en una concentración tal que hacen que su extracción resulte viable. En consecuencia, la ubicación del mineral a extraer es única y discreta por cuanto es cuantificable su extensión real y en profundidad. Las tareas de prospección y exploración minera son las encargadas de estos estudios. Una vez ubicado el yacimiento se desarrollan estudios de prefactibilidad y factibilidad en los cuales se determina la forma de explotación, las tecnologías a utilizar para el tratamiento del mineral, la ubicación en el terreno de sus diversos componentes e insumos, entre otros puntos.

El Tribuno