San Juan/Pulseada sin tregua: Cruce internacional entre un proyecto minero top y los dueños del campo:; pocos comentarios, mucha tensión
- 26 de octubre, 2023
Los Azules y Campo Cortes Monroy de Calingasta se cruzan denuncias y amenazas. En la empresa prefieren el silencio mientras escala una confrontación que hace ruido en los mercados globales.
Una denuncia de usurpación y una amenaza de extorsión como telón de fondo de una pulseada por varios millones de dólares por el uso de la tierra calingastina sigue escribiendo capítulos con resonancia en todo el ambiente minero.
La primera fue presentada por el Campo Cortez Monroy (CCM) contra no sólo la controlante del proyecto Los Azules, la compañía Andes -a su vez manejada por la canadiense McEwen Minning- sino también a sus recientes socios para el proyecto sanjuanino, dos gigantes de los negocios globales como la automotriz Stellantis y la minera Río Tinto. Por la presunta ocupación de una extensión en la superficie ubicada en el límite entre Argentina y Chile para construir una pista de aterrizaje. La segunda, las amenazas, cursadas por el gerente de Andes, el alemán Michael Meding, contra el apoderado de CCM vía carta documento por un mail que éste envió al presidente de la empresa Rob McEwen. Y la tercera, por un viejo reclamo de pago por servidumbre con una eterna negociación por mucho dinero que pone impacientes a ambos bandos.
Ese coctel explotó las últimas semanas ante la falta de avance del acuerdo de ese dinero. Y a días de que se conociera por Tiempo de San Juan el trámite penal y su respuesta amenazante por carta documento, las partes prefirieron el silencio de micrófono, pese a la escalada del tono entre ellos. Eso es lo que confirmaron a Tiempo desde ambos lados: no quieren hablar en público, pero la escalada de la tensión aparece evidente.
Lo único que se limitó a expresar su apoderado legal Rodolfo Ovalles a Tiempo es que aún no fueron notificados, que la pista de aterrizaje a la que alude la denuncia de usurpación no fue construida, sino que es un proyecto "a futuro" y que la justicia debería "rechazarla". Pero no dijo si habían concretado la amenaza de denunciar al abogado por una presunta extorsión.
En Azules-McEwen están furiosos con los dueños del campo cuya superficie ocupan para moverse hacia y desde la mina porque interpretan que fueron ellos los que sacaron el tema a la luz en el medio de la negociación. Desde CCM lo niegan, aunque no se ahorran duras críticas contra el management del proyecto minero sanjuanino. Ejercido por Meding y otros ejecutivos eyectados de Veladero como él que desarrollaron este nuevo emprendimiento.
Los Azules es –junto a Josemaría, Altar o Pachón- una de las 3 o 4 perlas potenciales de la minería sanjuanina, concentrada en abordar la promisoria minería del cobre pero muy lejos de poner la primera piedra real. Lleva 32.000 metros de pozos perforados y un fuerte avance en sus descubrimientos que entusiasman a la empresa y al ambiente local.
Está conducida por Meding, un gerente con amplia experiencia en los ambientes económicos y políticos locales desde su experiencia anterior en Barrick, de la que salió en la amplia renovación de la mina junto a otros ejecutivos que lo siguen acompañando ahora en Azules. Ahora, puso la fecha tentativa de inicio de la mina de McEwen para fines del 2024 como mínimo. Si es que se disipan los fantasmas políticos que enumeró en su última aparición pública en la que se expresó frontalmente por un cambio de administración criticando crudamente a la conducción económica liderada por Sergio Massa (ver ‘Los Azules, la mina sanjuanina que apuesta políticamente por "el cambio"’). Lejos de desactivarse la temperatura política en la que Massa ahora compite contra Javier Milei por la presidencia, el proyecto Los Azules aparece como cada vez más lejano en la chance de que se convierta una mina.
Por eso además del diferendo contra CCM por el impago de la servidumbre, el aterrizaje de una causa penal por usurpación no hace más que empeorar las cosas. La deuda con el campo calingastino aparece porque las concesiones mineras son otorgadas por los dueños de los yacimientos bajo tierra –en el caso de la ley argentina, las provincias- pero los proyectos mineros deben abonar a los propietarios de la superficie un canon por su uso y servidumbre.
Por ese motivo, CCM tiene reclamos tanto administrativos como hasta judiciales con varios proyectos que o están en su territorio o lo utilizan para desplazarse. Como son los casos de Fortescue en dos áreas de concesión (sobre lo que también hay varios capítulos internacionales que hicieron ruido y probablemente seguirán dando de qué hablar), Altar u otros vecinos de Pachón.
En el caso específico de Los Azules, el diferendo se disparó porque la minera y CCM tuvieron un acuerdo por ese concepto hasta hace 18 meses, cuando expiró. Desde ese momento, nunca pudieron ponerse de acuerdo en los montos de la renovación, que Azules pretende ejecutar hasta el fin de la vida útil de la eventual mina, dentro de 30 años.
La fricción que provocó la falta de entendimiento derivó en una denuncia penal por usurpación, que fue presentada por Armando Guevara, representante legal de CCM, el 8 de septiembre pasado ante la fiscalía del sistema mixto.
En dicha denuncia, el campo argumentó que McEwen reconoció que su proyecto está haciendo uso de una superficie adicional a los 12 kilómetros de servidumbre cuyo canon están negociando: son 200 hectáreas más que estaría empleando para una pista de aterrizaje y unos 40 kilómetros extras de servidumbre hacia el sector de Pachón.
Los propietarios de CCM sostienen que la superficie para construir el citado aeropuerto en la zona limítrofe de Argentina con Chile no está sujeta a ninguna adjudicación como área de exploración porque es superficie y no subsuelo. Y, que por lo tanto, no hay ninguna área adjudicada por la autoridad de aplicación sobre ese espacio que ellos aseguran estar empleando, de acuerdo con la respuesta de McEwen que Guevara adjunto con la denuncia tras hacerla certificar por el escribano Quevedo Mendoza.
Los dueños del campo interpretan que de la lectura del correo enviado por McEwen surge la confirmación de "que han ingresado al campo de nuestra propiedad 200 ha para la construcción de una pista de aterrizaje y allí se encuentra configurada la usurpación”.
Otra postal de la tensa relación quedó manifestada en la posibilidad de que surjan más denuncias penales. Michael Meding le comunicó a Armando Guevara, apoderado del campo, que sopesan denunciarlo "por tentativa de extorsión o extorsión contenida en el correo electrónico enviado a Rob McEwen” e intimó al letrado a que exprese “si los hechos, actos y conductas (…) son de su propiedad intelectual”.
Armando Guevara rechazó en "todos sus términos" la Carta Notarial que le remitieran por su "manifiesta improcedencia, temeridad y malicia” y aseguró que su manera de proceder siempre fue en condición de representante legal de Campo Cortez Monroy.
La respuesta completa del apoderado de Los Azules a Tiempo de San Juan
“Hemos tomado conocimiento de la denuncia realizada a través de correos electrónicos del abogado actuante del titular superficial, Armando Gabriel Guevara, quien adelantó esta denuncia a Los Azules en el mismo instante en que la presentó a la justicia. Hasta el momento no hemos sido notificados formalmente.
De todas formas, queremos informar que Azules cuenta con todos los permisos y habilitaciones necesarias para nuestra actividad, incluido los derechos mineros y servidumbres constituidas y afianzadas de acuerdo con el Código de Minería. Respecto a la pista de aterrizaje a la que alude el denunciante, queremos destacar que la misma no ha sido construida y es un proyecto a futuro que buscará garantizar la seguridad de los trabajadores en situaciones de emergencia.
En estricto rigor legal y en caso de que esta denuncia se encuentre en trámite en la justicia, interpretamos que carece de fundamento jurídico y debería ser rechazada por el jugado que finalmente intervenga. Somos respetuosos de nuestras instituciones y por ende de la decisión judicial que se determine”
Tiempo de San Juan