Un joyero fabrica una mascarilla de oro y diamantes valorada en 1,5 millones de dólares

El lujo y la ostentación no ha tardado en llegar también al último complemento que, por desgracia, se ha convertido en indispensable en los últimos meses: la mascarilla. Diversas formas de moda están sacando al mercado sus propuestas. La más llamativa, sin duda, es la mascarilla de oro y diamantes elaborada por el joyero israelí Isaac Levy, cuyo valor se estima en 1,5 millones de dólares. por José Ángel Pedraza Según informa la agencia de noticias Associated Press, la compañía joyera israelí Yvel está trabajando en la mascarilla más lujosa del mundo, e

El lujo y la ostentación no ha tardado en llegar también al último complemento que, por desgracia, se ha convertido en indispensable en los últimos meses: la mascarilla. Diversas formas de moda están sacando al mercado sus propuestas. La más llamativa, sin duda, es la mascarilla de oro y diamantes elaborada por el joyero israelí Isaac Levy, cuyo valor se estima en 1,5 millones de dólares.

por José Ángel Pedraza

Según informa la agencia de noticias Associated Press, la compañía joyera israelí Yvel está trabajando en la mascarilla más lujosa del mundo, elaborada con oro y cuajada de diamantes.

El responsable de hacer realidad el sueño de uno de los clientes de la firma ha sido el diseñador y propietario Isaac Levy, quien ha elaborado las distintas piezas que la componen, en oro blanco de 18 quilates con 3.600 diamantes blancos y negros incrustados.

Para cumplir adecuadamente su función de evitar el contagio del Covid-19, la mascarilla está convenientemente equipada con filtros N99, los que tienen la certificación más alta, según solicitó el cliente.

Levy explicó otras peticiones del singular cliente, del que solo se sabe que es un empresario chino que vive en los Estados Unidos: que estuviera terminada antes de finales de año y que fuera la más cara del mundo. Una petición, esta última, que fue la más fácil de cumplir, según el diseñador.

Este brillante complemento va a añadir glamour a esta prenda de protección que ya es obligatoria en muchos países. Sin embargo, su peso, cercano a los 270 gramos (100 veces el de la típica mascarilla quirúrgica) no la hace especialmente práctica ni mucho menos cómoda.

Levy no quiso entrar en polémica sobre si considera apropiado que una persona se gaste ese dinero en una mascarilla, cuando mucha gente se ha quedado sin trabajo o está sufriendo estrecheces económicas: "lo que me importa es que esta mascarilla nos ha proporcionado trabajo suficiente como para mantener a mis empleados durante estos tiempos tan difíciles".

La mascarilla de Yvel no es la única que hemos visto elaborada con oro. Hace unas semanas dábamos a conocer la que había encargado un empresario indio, realizada con dos onzas de oro puro, valorada en unos ?modestos? 4.000 dólares.

Oroinformacion.com