Utilizar un lenguaje sencillo para explicar la minería, Por WALDO CHAYLE.
- 29 de julio, 2022
La década de los años 90 ha sido una bisagra en el tema minería, marcó un antes y un después.
En el "antes", la actividad minera no tenía los controles ambientales y los métodos de explotación que tienen actualmente.
Sin embargo una parte de la sociedad, continúa utilizando como argumento el "antes" para oponerse a la actividad minera. Ellos tienen un discurso simple, que todos pueden entender con pocas palabras, sin muchas explicaciones, porque dicen, por ejemplo, "las minería contamina el agua con sustancias químicas", "utilizan el agua y secan los ríos", "la minería mata". Estas expresiones son fáciles de entender aunque no tengan argumentos. En el imaginario de las personas, si agrego algo químico en el agua contamina sin duda. Si extraigo agua de un río o del subsuelo, ese caudal disminuirá o probablemente quedara sin agua, cuando dicen que la minería mata, no hace falta explicar nada.
Si los mineros, les explican que no es verdad la contaminación como les dijeron, porque actualmente es una actividad controlada mediante inspecciones, monitoreo, Leyes que regulan o controlan la actividad minera y el agua de la región, en primer lugar, las personas tienden a creer más en lo malo que en lo bueno y en segundo lugar se requiere informarles con argumentos y en lenguaje sencillo.
Los mineros o personas relacionados a la actividad, deben realizar un trabajo meticuloso para convencer y concientizar a la sociedad que la minería practicada actualmente es moderna, con Leyes, tecnología, métodos y profesionales. Deben ser transparentes en la transmisión y difusión de la minería, también decir que puede haber accidentes imprevistos como en cualquier actividad, por ejemplo, se construyen aviones para volar transportando persona y no para que exploten o se precipiten a tierra, sin embargo existen accidentes.
El problema no es solamente, explicar a las personas que reciben información errónea de los antimineros, la cuestión es explicarle a toda la sociedad, respecto a la actividad minera real. Para lograr esto, es necesario informar de los procesos mineros y utilizar lenguaje sencillo y no técnico.
Es común la organización de eventos técnicos y científicos por diversos organismos, incluso por empresas mineras, y son abiertas al público, pero cuando observamos a los asistentes son, técnicos, profesionales, investigadores y las exposiciones versan sobre actualizaciones, descubrimientos o trabajos realizados con lenguaje técnico que todos comprenden sin problemas y en general son exitosos esos eventos. Cuando las explicaciones o conferencias exponen para un público que no está relacionado a la minería, seguramente entenderán muy poco o nada, incluso si la explicación es acompañada con dibujos infantiles, no es posible entender claramente con el lenguaje técnico utilizado. Ese público, desde la escuela primaria no tiene conocimientos mineros, porque en la planificación curricular no está previsto y muchas personas saben de minería lo que les transmiten los activistas antimineros. La otra cuestión es que, debieran existir campañas o programas para transmitir o difundir la actividad minera, con lenguaje sencillo, en las escuelas, colegios, centros vecinales, comunidades originarias, Facultades.
En la difusión deben participar los Colegios de Ingenieros, Geólogos, Agrónomos, Agrimensores, Ministerios de Educación, Ambiente y de Producción, Universidad y las Empresas mineras.
Es una deuda que tienen los mineros con la sociedad. Los reclamos de algunos sectores, en contra de la minería, es entendible, porque les decimos que está todo bien con la minería, pero algunos desconocen la verdad, otros manejan una versión equivocada de la actividad y ante el desconocimiento surge la incertidumbre y la inseguridad.
El Tribuno