Versus: qué dicen las proyecciones mineras de Mendoza y San Juan
- 30 de abril, 2024
El Plan Pilares apunta al desarrollo minero de Mendoza a 2050. En San Juan tienen cuatro proyectos de la "Mesa del Cobre" y se proyectan al 2063. ¿Qué dicen ambos planes?
Edu Gajardo
En la previa de Vendimia y del viaje de Alfredo Cornejo a Canadá para participar del PDAC 2024, se presentó el Plan Pilares, el cual es una proyección de Mendoza con el desarrollo minero de 4 proyectos cupríferos. En la previa de la feria San Juan Minero 2024, desde la Cámara Minera de la vecina provincia están recodando las proyecciones que tienen de los cuatro proyectos de la "Mesa del Cobre". Vale preguntarse entonces, qué proyecta cada provincia para el desarrollo minero.
Aunque en ambos casos son proyecciones, hay que aclarar que la situación sanjuanina se hace sobre cuestiones concretas, ya que de los cuatro proyectos que ponen sobre la mesa, uno está en las puertas de la construcción y los otros tres tienen exploraciones avanzadas con muy buenos resultados y estudios de factibilidad. En el caso de Mendoza son proyecciones sobre el potencial, ya que en los proyectos que incluye el Plan Pilares se consideran pórfidos de cobre que aún no están explorados y no tienen datos concretos.
Lo curioso en el último punto mencionado, es que en la mencionada "Mesa del Cobre" (formada por los 8 proyectos de cobre más avanzados en la Argentina), hay un proyecto mendocino, San Jorge, el cual por ahora no es considerado por el Ejecutivo provincial en ninguna de las proyecciones que se están haciendo referidas al desarrollo minero.
En el caso de Pilares, el plan mendocino, se hace una proyección al año 2050 en base a 4 proyectos de cobre y Potasio Río Colorado. En el caso específico del metal rojo, apuntan a la posibilidad de que Mendoza sea capaz de producir 500.000 toneladas de cobre por año.
En el caso sanjuanino, sobre la mesa se ponen Josemaría, Pachón, Los Azules y Altar con una proyección a 40 años que va desde 2023 hasta 2063. Se considera a estos 4 proyectos porque podrían comenzar su actividad más intensa hasta el 2027, pensando en niveles importantes de exportación ya en el 2030. En esta proyeccción, incluso, se deja fuera a Filo del Sol, proyecto que también tiene muy buenos resultados en un largo proceso de exploración y que sumó a BHP como socio en el proceso.
Puestos de trabajo y nivel de exportaciones
Un dato sumamente relevante, es que si bien San Juan lleva muchos años sólo con dos proyectos en producción (Veladero y Gualcamayo), el trabajo realizado en exploración les permite pensar en una producción significativa de cobre para el 2030. Mendoza, que está recién iniciando el camino de la exploración, a priori (y considerando los plazos de la industria en la actualidad), con viento a favor para esa fecha podría estar iniciando alguna exploración avanzada o el desarrollo de estudios de prefactibilidad de algún proyecto con buenos resultados de exploración en el distrito que impulsa el Ejecutivo.
Pilares, con los cuatro proyectos mencionados más PRC, considera que en Mendoza se pueden generar exportaciones por US$3.150 millones por año, doblando lo que en la actualidad se exporta, una cifra que está prácticamente estancada hace una década. También se podría lograr algo que tampoco está sucediendo hace años, que es la generación de empleo genuino. El plan proyecta 2.135 empleos directos y 4.930 indirectos.
En el caso de San Juan, los cuatro proyectos mencionados podrían estar en niveles de exportación de US$3.000 millones anuales para el 2030, pero con un cálculo de la libra de cobre en un precio de US$3. En la actualidad el precio alcanza los US$4,6 por libra y se proyecta que para el 2025 llegue a los US$5. De mantenerse esa tendencia, las exportaciones para el 2030 podrían superar ampliamente el número proyectado. En lo que se refiere a empleo, esperan crear 20.000 puestos directos y 80.000 indirectos permanentes para el 2033.
Recordemos, además, que hoy la minería en San Juan exporta en torno a los US$1.000 millones anuales a través de la producción de oro. Con el anuncio de la extensión de la vida útil de Veladero, lo que aporte el oro futuro podría sumarse a la proyección del cobre. Del mismo modo, de concretarse el proyecto de carbonatos profundos de Gualcamayo, también podrían sumar más exportaciones para el inicio de la nueva década.
La gran diferencia entre ambas proyecciones radica principalmente en la decisión política que existió en San Juan para instalarse como una provincia minera. Eso, la llevó a desarrollar proyectos de producción y la exploración de manera importante para tener en puerta grandes proyectos cupríferos. Mendoza, en tanto, tuvo la Ley 7.722 que frenó todas las inversiones y faltó la decisión política que se está dando actualmente. Eso llevó a retrasar el inicio de procesos que en la industria minera son extensos y complejos. Ahora falta ver si las exploraciones confirman el potencial cuprífero de Mendoza.
Memo