En su época de esplendor, en la mina se extraía wolframita y trabajaban decenas de personas. Ahora es un paseo obligado.
Los alumnos del I.P.E.T N° 232 transforman residuos mineros en productos reutilizables y amigables con el ambiente.
Se trata del pasivo ambiental que dejó el complejo minero Los Gigantes en la década del 80.
El "segundo tiempo" del gobernador se focalizará en la obra pública.