Existen Nuevos horizontes: Sin minería no hay progreso, Por Claudio A. Parica

En lo personal, al hablar de minería, mi posición siempre es positiva, puesto que desde que el hombre es hombre, la minería, por primitiva que sea siempre estuvo presente.

La civilización sin minería hubiera sido impensable, así como un presente y un futuro también lo son. A veces me pasa por la mente la frase “todo es minería”. Y tanto es así que, cuando uno se enfrenta a los grupos de ambientalistas talibanes, es necesario hacerles tomar conciencia que, de hecho, tienen un celular en la mano, cuentan con una computadora, gozan del confort de una vivienda construida con cemento, tienen energía eléctrica que en el mismo hogar es distribuida por cables de cobre, se movilizan en auto, en distintos medios de transporte, hasta una bicicleta inclusive, y en cada cosa que utilizan la minería está presente.

Más allá de las consideraciones iniciales, y con miras no solo al futuro cercano sino también en el mediano y largo plazo siempre debemos entender que la minería es factor fundamental de progreso y generación de divisas para el país, como también entender que es nuestro deber desarrollar proyectos mineros sustentables y amigables con  el ambiente y la sociedad en general. En mi mente también está Belgrano quien, entre muchos de los legados que nos ha dejado era el valor agregado, promovía la exportación de productos elaborados y no de materia prima. Belgrano veía que se exportaba lana, cuero entre otras materias primas y luego se importaban productos manufacturados con esa materia prima que, no puedo más que coincidir, y lo extrapolo a la minería, extraer minerales es bueno, pero procesados, mucho mejor. Pensemos solo en el litio, contamos con grandes yacimientos, pero procesar ese litio para ya contar con las baterías para uso local y para exportar es mucho mejor, implica un desarrollo mucho mayor.

Ahora cabe preguntarse, ¿nuestro país cuenta con capitales suficientes para inversiones de tal magnitud?, en algunos casos es posible que existan, pero siendo realistas, es necesaria la inversión extranjera, para lo cual sí o sí se deben generar las condiciones para que las mismas se puedan realizar, y acá es donde comienza la participación del Estado Nacional, es necesario contar con el marco legal sólido sobre el que se pueda planificar en el corto, mediano y largo plazo, de otra manera no hay forma en que se fomenten las inversiones en el país.

La minería y el ambiente

Siempre aparecen cuestionamientos a la minería en relación al ambiente, como así también al uso del agua, y en buena medida en tiempos pasados se han registrado impactos muy negativos en el ambiente, normalmente por falta de prevención, aún existen casos que se arrastran desde la década de 1940 que aún no han sido remediados. Claro, es necesario invertir para remediar los temas ambientales que se han perpetuado en el tiempo, no hace falta que los mencione de manera particular, simplemente existen, no demasiados pero existen. Por esto no debe desatenderse el tema ambiental y siempre es necesario contar con planes de manejo para minimizar los impactos, temas que ya hacen a la ingeniería ambiental. Con eso se plantea la necesidad de encarar toda explotación minera con el trabajo conjunto de geólogos, ingenieros en minas, ingenieros ambientales como mínimo, contar con grupos interdisciplinarios con miradas distintas y que deben confluir para alcanzar la sostenibilidad de las actividades.

Las provincias antimineras, un tema aparte, y hago especial referencia a Chubut, una provincia rica en recursos, el petróleo se explota, pero el desarrollo minero se ha visto frenado por grupos ambientalistas que, paradójicamente habitan en la comodidad de las ciudades, en tanto que impiden el desarrollo de los pueblos del sur de la meseta de Somún Curá, con argumentos inconsistentes, solo con presunciones de escasa validez. Siendo que los pueblos como Telsen, Gan Gan, Gastre se ven condenados a la pobreza, a la desaparición que, sus habitantes, quienes conocen su hábitat aprueban y desean el desarrollo minero.

Mientras existan posturas propias de talibanes ambientalistas, estos pueblos están condenados y repito, por ambientalistas que viven en la comodidad de las ciudades con asfalto, casas de material, electricidad, internet, celulares, computadoras, etc., todo gracias a la minería que luego tanto rechazan. Estos grupos violentos, son en definitiva el freno al progreso regional y nacional.

Hacia nuevos horizontes

A partir de la llegada al gobierno del Presidente Javier Milei, y si bien es muy temprano al día de la fecha, se avizoran  nuevos horizontes, que en lo personal entiendo que el “prohibido prohibir la exportación” tiene un significado muy importante, pues la eliminación de trabas constituye una apertura al mundo que, con reglas claras la llegada de capitales para la producción es algo que en el corto plazo debería ser un hecho, ligado a ello la puesta en marcha de nuevos emprendimientos mineros, generación de empleo, tanto directo como indirecto.

En Memoria al Consulado de 1802 Manuel Belgrano –primer economista argentino al que sólo se lo recuerda por la bandera– decía: “Todas las naciones cultas se esmeran en que sus materias primas no salgan de sus Estados a manufacturarse, y todo su empeño en conseguir, no sólo darles nueva forma, sino aun atraer las del extranjero para ejecutar lo mismo. Y después venderlas”.

Creo que lo citado en el párrafo anterior nos debe guiar, dar valor agregado a los productos, como fuente de progreso para la economía con las consecuencias de ello, ingreso de divisas al país, generación de trabajo y mejora de las condiciones de vida de la gente.

Conclusiones

Con lo expuesto solo pretendo exponer la importancia de la minería en el país, el apoyo que se le debe dar desde el gobierno, abriendo mercados, ingreso de empresas con capitales frescos que permitan ampliar las fuentes de trabajo, promoción de las poblaciones en el entorno minero, de las industrias que indirectamente aportan a la industria minera, promover el procesamiento de los minerales, tanto para el uso interno como para la exportación, evitando la exportación de materia prima sin procesar.

Siempre existen los grupos antimineros que suelen manifestarse careciendo a de argumentos sólidos, que si bien no se los puede obviar, los gobiernos deben tener la mente suficientemente clara para tomar decisiones equilibradas y en pos del progreso provincial, nacional y de la sociedad.

Desde luego, hacer que toda actividad minera resulte sostenible ambientalmente y finalmente, lograr condiciones legales que brinden confianza en el corto, mediano y largo plazo, reglas claras.

Sin minería no hay progreso.

Por Claudio A. Parica

Presidente Consejo Superior Profesional de Geología

Profesor Asociado Regular Universidad de San Martín

Prensa GeoMinera